Es de gasolina y tiene etiqueta C de la DGT

Toyota Aygo X Cross Chic S-CVT: ¿el urbano ideal?

Miguel Tineo
Miguel Tineo
Con sus 3,70 metros de largo, el Toyota Aygo X Cross es el coche más pequeño de toda la gama Toyota. ¿Es el coche ideal para moverse por ciudad?

El Toyota Aygo X Cross es un microurbano con aspecto de SUV que ha sustituido al anterior Aygo. Emplea una variante de la plataforma GA-B, que es la que emplea el Toyota Yaris, el Toyota inmediatamente superior en tamaño. Cuesta encontrarle rivales directos a este Toyota; de hecho, los más parecidos quizá sean el Suzuki Ignis, el Kia Picanto X-Line y el Fiat Panda Cross, por su apariencia de coche más para campo. Si obviamos ese detalle, que es más estético que otra cosa, y nos centramos en su tamaño y en el concepto de vehículo como tal, encontramos otros rivales como el Fiat Panda normal, el Hyundai i10, el Mitsubishi Space Star o el Kia Picanto normal.

Información del Toyota Aygo X Cross

El Toyota Aygo X Cross se vende con una sola carrocería de cinco puertas y 3,70 metros de largo. Sólo se comercializa con un motor de gasolina 1.0 de tres cilindros atmosférico que desarrolla 72 CV y 93 N de par. No cuenta con sistema alguno de electrificación, por lo que tiene etiqueta C de la DGT. Se ofrece con dos cambios, uno manual de cinco marchas y otro automática de variador continuo con siete supuestas relaciones, por 1.250 euros. Pese a su apariencia, el Aygo X Cross sólo tiene tracción delantera y no tienen ningún tipo de control de tracción específico para campo. Es más, sus neumáticos, unos Falken Sincera SN110A, son de asfalto y de corte ecológico. Hay tres niveles de acabado: Play, Like y Chic.

Cómo es el Toyota Aygo X Cross por dentro

El interior del Toyota Aygo X Cross se caracteriza por tener un diseño sencillo y que, por sus formas, podríamos definir como desenfadado. Esta versión Chic cuenta de serie con una instrumentación digital formada por dos pantallas, con una segunda superpuesta por encima de la principal. Es un detalle bien resuelto, pero que anticipa las soluciones sencillas que caracterizan a todo el interior: mucho plástico duro, apertura de compás de las ventanillas traseras, zonas de chapa vista en los paneles de las puertas, una bandeja de maletero de tela flexible y fácilmente enrollable… No es un coche que recurra a materiales precisamente lujosos, pero no hay desajustes evidentes y, en marcha, no se aprecian crujidos (y, si los hay, quedan camuflados por el notable sonido del motor). Es, además, lo habitual en este segmento.

Toyota Aygo X Cross 00024

Esa sencillez hace que haya cosas muy positivas, como mandos físicos para el climatizador automático o una pantalla central con iconos muy grandes y unos menús muy sencillitos por los que navegar y que no complican demasiado la vida al conductor. En otros aspectos, en cambio, se han quedado un poco justos; por ejemplo, el volante se regula sólo en altura y, aunque la postura al volante es buena, un reglaje en profundidad siempre permite afinar más. También cabe destacar que la postura al volante es más bien baja, como la de un turismo normal, y no tan elevada como suele pasar en un SUV, algo que uno podría esperar de este Aygo X Cross por su aspecto exterior.

Las plazas traseras sólo están homologadas para dos personas, y mejor: no sobra anchura para meter a tres personas. Por altura no están mal, pero el espacio para las piernas es escasa, igual que el hueco que queda cuando abrimos la puerta para acceder. No son, por tanto, las mejores para personas de más de 1,75-1,80 metros de estatura. En cuanto al maletero, sus 231 litros son una cifra razonable para el tamaño del coche, y es más aprovechable por altura y anchura que por profundidad. Eso sí, la citada bandeja flexible le da un plus de practicidad. Hay un kit reparapinchazos de serie.

Cómo va el Toyota Aygo X Cross

El Toyota Aygo X Cross es un coche indicado sobre todo para trayectos urbanos y extraurbanos por varios motivos. Para empozar, es un coche de sólo 3,70 metros, y eso le convierte en un coche muy manejable en ciudad, ideal para callejear y para aparcar con relativa facilidad. En ciudad, el motor tiene una respuesta alegre, y sus 72 CV dan bastante juego para moverse con agilidad hasta 90-100 km/h. Además, su consumo es un punto a favor, pues en ese tipo de recorridos mixtos es fácil mantenerse en torno a 5,5-6 L/100 km. La dirección tiene un tacto suave, la visibilidad es bastante buena, la suspensión se muestra suficientemente dulce a la hora de pasar baches y el cambio automático de esta versión convence por respuesta.

En carretera, el Toyota Aygo X Cross se defiende bien para realizar trayectos a ritmos tranquilos, pero debemos tener en cuenta varios aspectos. Primero, su motor 1.0 de 72 CV sigue siendo muy voluntarioso, pero por encima de 110-120 km/h se muestra ruidoso, sobre todo a la hora de subir pendientes, momento en el que es recomendable reducir alguna marcha para ascender con algo más de contundencia, pues a partir de esta velocidad empieza a verse un tanto limitado. Además, y en el caso del cambio automático de siete marchas, las dos últimas velocidades tienen un desarrollo más bien largo que favorece el consumo, pero que en ocasiones nos obligará a bajar a quinta para mantener por ejemplo los 120 km/h en autopista si vamos subiendo por una pendiente media, y eso también eleva el ruido de la mecánica considerablemente, y eso que ya es ruidosa de por sí. Por cierto, este cambio es de variador continuo, pero su funcionamiento nos ha convencido.

En carretera también hay otros dos aspectos a tratar: la comodidad y el comportamiento. En el primer aspecto, el Toyota Aygo X Cross cumple tan bien como sus rivales y, aunque lógicamente no pueda ofrecer la comodidad de un Toyota RAV4, no es ningún suplicio hacer un trayecto largo a bordo de este Toyota. En cuanto a comportamiento, es una de las cosas que más nos ha sorprendido y gustado de este coche. Su ligereza (1.015 kilos en el caso de esta versión, y es la más pesada de la gama), la precisión de la dirección y la buena puesta a punto del chasis hacen que este Aygo X Cross se muestre muy ágil en zonas curvas, y que reacciones muy bien ante los cambios de dirección, con una respuesta siempre noble y predecible. Gracias a esto, el resultado es tan bueno que, sin duda, podría con un motor más potente sin problema alguno.

Cuánto cuesta el Toyota Aygo X Cross

En cuanto al precio, el Toyota Aygo X Cross está disponible desde 14.400 euros con acabado Play y cambio manual. La versión tope de gama, la Chic automática de esta prueba, sale por 18.400 euros. Puede parecer caro para un coche de este tipo y, la verdad, es que es mucho más caro que los Aygo anteriores; sin embargo, y con la subida de todos los coches, lo cierto es que está en línea con sus rivales. El Fiat Panda Cross más barato es el 1.0 Hybrid City Cross (con etiqueta Eco de la DGT), que cuesta desde 17.450 euros (hay un Panda normal con ese motor desde 14.350 euros), y el Suzuki Ignis más asequible (1.2 Hybrid GLE de 83 CV, con etiqueta Eco) cuesta desde 16.304 euros (y hay uno con tracción total desde 18.464 euros). Fuera de la apariencia campera, un Hyundai i10 1.0 de 67 CV cuesta desde 14.750 euros, y con el motor 1.2 de 84 CV está disponible desde 19.290 euros (también una versión deportiva N-Line de 100 CV por 21.240 euros). En el caso del Kia Picanto, la versión X-Line 1.0 T-GDi de 100 CV vale 18.168 euros, pero hay un Picanto normal de 67 CV desde 13.640 euros, desde 16.418 euros si optamos por la versión de 84 CV y por 17.219 euros si nos quedamos con el 1.0 T-GDi GT Line. Por último, un Mitsubishi Space Star con 71 CV cuesta desde 13.650 euros, y desde 17.800 euros con cambio automático.

 

Toyota Aygo X Cross