Más de 7 de cada 10 usuarios de patinetes eléctricos aún circula por la acera, pese a la prohibición explícita de esta conducta desde enero de 2021 (hace ya más de un año) y de que supone una sanción de 200 euros.
Junto a esta costumbre de circular todavía por la acera, los usuarios españoles reconocen abiertamente no respetar las normas que rigen el uso de estos vehículos: así, hasta un 50% reconoce además que no utiliza habitualmente el casco (obligatorio desde el pasado marzo siempre que la Ordenanza de movilidad de tu localidad así lo exija, y sancionado con otros 200 euros. ) y un 45% supera habitualmente la velocidad máxima de 25 km/h para estos vehículos.
La falta de respeto a la normativa, (de hecho, los españoles creen que los usuarios de VMP son los que menos respetan las normas de tráfico) y el aumento de estas nuevas formas de movilidad, cuando hasta 17,4 millones de españoles reconocen usar ocasionalmente uno de estos patinetes eléctricos o una bicicleta ayudan a explicar varios datos que explica este informe de la Fundación Línea Directa, como el hecho de que, de 2011 a 2020, la accidentalidad en núcleos urbanos haya aumentado un 42% o que, en 2020, el 80% de los fallecidos por accidente en ciudad son usuarios vulnerables y el 10%, usuarios de patinetes o de bicicletas eléctricas.
Un 24% más de accidentes en los próximos 10 años
El informe, que ha presentado en Madrid por Mar Garre, directora general de la Fundación Línea Directa, y que se ha realizado junto a la Fundación Española para la Seguridad Vial, se ha basado en las bases de datos de accidentalidad de la DGT; pero también ha recogido la opinión de 1.700 encuestados.
Lo más significativo es que este estudio, mediante complejos baremos estadísticos, se atreve a pronosticar cómo evolucionará la siniestralidad en nuestras ciudades “si no cambia nada y seguimos sin seguir las recomendaciones de la DGT”, explica Garre. Y las previsiones no son nada halagüeñas.
La accidentalidad en la última década (de 2011 a 2019) en núcleos urbanos se incrementó en un 41,6%; y el número de fallecidos alcanzó los 4.681, con un incremento del 13,5% de 2011 a 2019. Pero en los próximos años la situación podría ir significativamente a peor, no en vano este informe indica que de 2021 a 2030, el número de accidentes en nuestros núcleos urbanos pasará a alcanzar los 709.000, lo que supone un 24% más que de 2011 a 2019. Y no sólo eso, estos accidentes supondrán un total de 5.500 fallecidos, 831 más (un 18%) que en el periodo anterior.
Estos pronósticos se han alcanzado teniendo en cuenta datos que explican la transformación de la movilidad durante los últimos años, como el aumento de casi el 500% de los patinetes eléctricos en 2019 o las ventas de 700.000 bicicletas (un 10% de ellas, eléctricas) en 2021. Junto a ellos, otros factores mencionados en el informe, como que desde 2008 a 2020 el número de nuevos permisos de conducir ha descendido un 51% o que en las principales ciudades españolas, el uso del autobús público descendió 33% de 2019 a 2021… ayudan a explicar esa transición hacia los VMP como formas preferidas para moverse por ciudad.
¿Dónde se producen más accidentes de patinetes eléctricos?
Este estudio aborda esta pregunta mediante las respuestas de las 1.700 personas encuestadas para su realización. Y si la media en España es que 8,6 personas reconocen haber sufrido algún incidente relacionado con un VMP (patinetes eléctricos y bicicletas), las Comunidades Autónomas donde este porcentaje es más alto son la Comunidad de Madrid (13,2%), Extremadura (13,1%) y Castilla y León (12,7%). Por el contrario, regiones como Asturias (4%), Aragón (4,4%) y Canarias (5,1%) son dónde se producen el menor número de accidentes con estos vehículos.
¿Cómo está evolucionando la movilidad en las ciudades?
Este estudio también propone varias tendencias actuales en cuanto a la movilidad. Así, hasta el 72% de las personas encuestadas señalan que han cambiado sus hábitos de movilidad en los últimos años, con una mayor prevalencia del paseo y del uso de los VMP; mientras que un 60% ve probable que empiece a usar patinetes eléctricos, bicicletas o bicicletas eléctricas en los próximos meses. Además, el 41% de los encuestados tiene interés en que su próximo coche sea no contaminante; y de ellos, un 44% apuesta por adquirir uno híbrido y un 33%, uno eléctrico.
Ahora bien, los encuestados también indican que existen frenos a este cambio en la movilidad. El más significativo es que hasta un 69% ve el coche eléctrico como “inalcanzable” económicamente hablando. Además, un 50% de los usuarios de VMP declara que dejarán de usarlo si se obliga próximamente a matricular estos vehículos, frente a un 38% que señala que dejará de usarlo si se generaliza la obligatoriedad del casco y un 24% que también dejará de utilizarlo si las autoridades comienzan a generalizar las sanciones por circular por la acera.
Es curioso que los usuarios de patinetes eléctricos y bicicletas se muestren contrarios a medidas que tienen que ver con la seguridad… cuandola opinión general de la sociedad se muestra a favor: de esta forma, un 79% de los encuestados están a favor del uso obligatorio del casco en los VMP y un 75%, a favor de la limitación de su velocidad máxima a 25 km/h. Un 65% se muestra de acuerdo con la posibilidad de que tengan que contar con seguro (una iniciativa que, pese al apoyo de la DGT, aún no es obligatoria para los usuarios particulares) y hasta un 53% se muestra convencido de que los VMP deben circular por la calzada.
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