La industria de los vehículos eléctricos (EV) en Europa ha experimentado un cambio significativo desde que la Unión Europea impuso nuevos aranceles a las importaciones de vehículos eléctricos chinos, según un artículo publicado por Automotive News Europe. Con recargos que alcanzan hasta el 48% para algunos fabricantes, la UE ha decidido proteger su industria automotriz frente a una competencia que, en teoría, se beneficia de cuantiosas subvenciones estatales en China. Esta decisión ha provocado una notable desaceleración en las matriculaciones de EV chinos en el continente.
En julio de 2024, la entrada de vehículos eléctricos de fabricantes chinos como BYD y MG cayó en un 45% en comparación con el mes anterior, según datos recopilados por Dataforce, lo que refleja una fluctuación importante en el mercado. Esta caída está relacionada, en parte, con maniobras estratégicas de los fabricantes para ajustar su stock antes de la entrada en vigor de los nuevos aranceles el 5 de julio.

El impacto, en cifras
La implementación de aranceles de hasta el 48% ha tenido un impacto inmediato en las ventas de vehículos eléctricos fabricados en China. En los 16 países de la Unión Europea que informaron datos en julio, las matriculaciones de EV de marcas como BYD y MG cayeron un 45% respecto a junio, según datos proporcionados por Dataforce y recogidos por Automotive News Europe. Este descenso se atribuye principalmente a las maniobras de los fabricantes para agotar sus inventarios antes de que los nuevos aranceles entraran en vigor el 5 de julio.

Siendo los fabricantes chinos un agente fundamental en las ventas del segmento, obviamente su fluctuación ha afectado a las cifras globales, traduciéndose en una reducción del 38% en el cómputo global y en julio, y siempre según cifras de Automive News Europe recopiladas a partir de datos de Dataforce y Bloomberg.
El objetivo de estos aranceles es claro: proteger la industria automotriz europea de la competencia china. Los fabricantes chinos, que disfrutan de subvenciones estatales y una posición dominante en áreas clave como la tecnología de baterías, han sido acusados de causar un perjuicio económico a las marcas europeas. Las tensiones políticas entre Bruselas y Beijing han escalado, con amenazas de represalias por parte del gobierno chino mientras continúan las negociaciones para encontrar una solución.
Es importante señalar que los precios de los vehículos eléctricos chinos aún no han reflejado plenamente los costos adicionales derivados de estos aranceles, dado que los fabricantes están optando por absorber temporalmente el impacto. Además, los aranceles siguen siendo provisionales, con la posibilidad de que se suavicen si se llega a un acuerdo en los próximos meses.

La opinión de Autofácil…
La reciente imposición de aranceles por parte de la Unión Europea representa un desafío importante para los fabricantes chinos de vehículos eléctricos. No obstante, es importante destacar que estos aranceles siguen siendo provisionales, y es probable que se suavicen en el futuro si las negociaciones entre Bruselas y Beijing progresan.
En cuanto a los fabricantes chinos, queda claro que su ambición de expandirse en Europa sigue intacta. BYD, en particular, ha demostrado su capacidad para absorber temporalmente los aranceles mientras refuerza su presencia en el continente.
La situación aún es fluida, y la industria automotriz europea también está buscando alianzas estratégicas con fabricantes chinos para reducir costos y mantener su competitividad en el mercado de vehículos eléctricos. A medida que se acercan las fechas clave para determinar si los aranceles se harán permanentes o se suavizarán, el futuro del mercado europeo de vehículos eléctricos dependerá en gran medida de las decisiones políticas y comerciales que se tomen en los próximos meses.
Que se produzca ese «suavizado» es fundamental, porque todos los usuarios relatan el diferencial de coste entre eléctricos y térmicos, y es muy poco probable que los fabricantes chinos (así como aquellos europeos que fabrican algún modelo en China) absorban el 100% de los aranceles (antes, convertirán esas ventas en híbridos o híbridos enchufables, intensificando una estrategia que ya han empezado a aplicar).