Por fin ha llegado al mercado el nuevo Renault Mégane R.S., un modelo que se encuadra dentro de la categoría de los compactos deportivos y que se enfrenta a rivales de la talla del Ford Focus ST, Hyundai i30 N, Seat León Cupra o el Honda Civic Type R. Precisamente, la firma del rombo tiene a este modelo es su punto de mira y buscará arrebatarle el título de tracción delantera más rápido en el circuito de Nürburgring.
Estéticamente, esta versión tiene grandes diferencias respecto al Mégane convencional; destacamos sus paragolpes deportivos, el incremento de la anchura de la carrocería o una zaga donde resalta un alerón más prominente. Además, para optimizar el flujo de aire incorpora extractores en las aletas delanteras y un difusor trasero funcional.
En el habitáculo sobresalen unos asientos con un diseño similar al del Mégane GT –con cambios en el mullido-, un volante tapizado en piel/Alcántara y los pedales en aluminio. Por lo demás, mantiene un espacio para cinco ocupantes y un maletero de 384 litros.
Bajo el capó tenemos el motor 1.8 TCe de 280 CV, también utilizado en el deportivo Alpine A110 o en los Renault Talisman y Renault Espace. A diferencia de aquellos –que tienen un cambio de siete velocidades-, este bloque se puede asociar a una caja de cambios manual de seis relaciones o una automática de doble embrague EDC con idéntico número de marchas. ¿Sus datos técnicos? Con la caja EDC puede acelerar de 0 a 100 km/h en 5,8 segundos, alcanzar una velocidad punta de 250 km/h y registrar un consumo mixto de solo 6,9 litros/100 km.
Cuatro ruedas directrices
El Mégane RS destaca entre sus competidores por la adopción de un sistema de cuatro ruedas directrices -4 CONTROL- y su modo de conducción «RACE» en el que se eleva el umbral de giro de las ruedas traseras hasta los 100 km/h.
Además, por si esto fuera poco, también se incluye un tren delantero específico, amortiguadores con tope hidráulico –similar al empleado en los Renault Clio RS, Peugeot 308 GT y GTI-, Chasis Sport, diferencial electrónico, frenos Brembo y neumáticos sobredimensionados. Si aún queremos más, podemos optar por el chasis Cup -1.700 euros adicionales- con diferencial Torsen, una suspensión más firme y discos de freno específicos- para la variante manual. Más adelante llegará una versión Trophy con mayor par motor y una potencia final de 300 CV.
Este modelo puede equipar los últimos asistentes de conducción de la marca, un avanzado selector de modos de conducción y un sofisticado sistema de iluminación. Podrás hacerte con una unidad automática –fabricada en España- por un precio de 31.900 euros.