Han sido 45 años desde que, en 1979, Volvo lanzara su primer modelo con motor diésel: un Volvo 244 GL D6. Y esos 45 años también representan el despegue, augue, dominio y (en los últimos años) decadencia general de los motores de gasóleo en Europa. Ahora, y tras producir más de 9 millones de vehículos diésel (la empresa no tiene registros anteriores a 1991), Volvo acaba de poner fin a la presencia de motores diésel en su gama.
Lo ha hecho, concretamente, con la fabricación en la histórica planta de Torslanda (Suecia) de un Volvo XC90 (un modelo del que, a finales de la década de los años 2000, el 90% de sus ventas eran de versiones con motores de gasóleo) equipado con el propulsor de 4 cilindros y 2.0 litros mildhybrid de 235 CV y 480 Nm. Una unidad que, por cierto, no se pondrá a la venta, sino que irá directamente al nuevo museo y espacio ‘World of Volvo’, que la marca sueca inaugurará el próximo 14 de abril en Gotemburgo.
“Hace sólo cinco años, el motor diésel era nuestro pan de cada día en Europa, como lo era para la mayoría de los demás fabricantes. La mayoría de los coches que vendimos en Europa en 2019 funcionaban con diésel, mientras que los modelos eléctricos apenas empezaban a ganar tracción», señalan desde la marca que, sin embargo, apuesta decididamente por la electrificación: «La dirección totalmente eléctrica hacia la que nos dirigimos ahora es la correcta, y lo hacemos con la bandera bien alta».
Volvo: un presente cada vez más eléctrico
La decisión de Volvo de abandonar la producción de los motores diésel viene de lejos, concretamente, desde el pasado septiembre de 2023, cuando en la Semana del Clima de Nueva York, Volvo anunció que dejaría de producir vehículos diésel a principios de 2024.
Pero es que la cuestión se venía venir… desde más allá, no en vano ya en noviembre 2022 la empresa sueca hizo pública su decisión de no seguir invirtiendo en el desarrollo de motores de combustión.
De esta forma, el futuro de la firma sueca pasa por los coches eléctricos. No en vano quiere convertirse en una marca 100% libre de emisiones en 2030. Y, desde luego, va en el buen camino, ya que a las buenas ventas del XC40 Recharge (ahora llamado EX40) se suma el gran éxito comercial de su último modelo eléctrico, un Volvo EX30 que, en lo que va de año, ya está dentro del Top 10 de ventas de modelos eléctricos en Europa.
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