Compra un VW Golf GTI usado, un mecánico lo revisa y se lleva una sorpresa: tiene masilla hasta en el techo

El concepto de 'coche accidentado' es muy amplio. Hay algunos que han sufrido golpes no tan graves... y otros que quedaron destrozados, como es el caso de este VW Golf GTI.

La historia que te contamos hoy es para tirarse de los pelos. Cuando compras un coche usado, en ocasiones es posible que haya sufrido algún accidente. Es algo que puede pasar a raíz de su uso. Si no ha sido muy grave y, sobre todo, si ha sido convenientemente reparado, no hay mayor problema.

Sí lo hay cuando el accidente ha sido descomunal y, encima, la reparación es chapucera, como es el caso que te vamos a contar a continuación. Una persona compra este bonito VW Golf GTI 7.5 con apenas 50.000 km recorridos y, cuando lo revisan los especialistas de Need Car Help, hayan masilla hasta en el techo. ¡Y hasta bajo los asientos traseros!

El mecánico se desespera: «no lo había visto en mi vida»

Los síntomas de accidente grave y de reparación chapucera son tan evidentes que el mecánico se desespera asegurando que no ha visto tanta masilla en un coche en toda su vida.

Por un lado, el ensamblaje de todas las piezas del interior es pésimo, prácticamente quedándotelas en la mano cuando las tocas. Hasta el punto de que los airbags de cortina de reemplazo se ven a poco que tires unos centímetros del guarnecido del techo. Y encima parecen envueltos con cinta de carrocero.

No sólo eso. Tornillos sin apretar en el capó, piezas de carrocería no originales, faros con roturas… Todo fue, en su momento, reparado de la peor manera posible. Incluso se aprecia que la costura del asiento, recosida a raíz de la detonación del airbag, no está recta.

El coche, como verás en el vídeo, es un absoluto desastre. Hay evidencias claras de que sufrió un accidente muy gordo, pero peor aún es la manera en la que fue reparado, más chapucera imposible, enmasillándolo sin pudor en lugar de colocando paneles nuevos (o aunque sea usados o reacondicionados), como por ejemplo en el techo. «El coche está deshecho».

Cómo es el Volkswagen Golf que está revisando el mecánico

Se trata de un VW Golf GTI 7.5, o lo que es lo mismo, una unidad con el restyling que en su momento recibió la séptima generación de este icónico compacto deportivo. Y es una variante GTI, aunque desconocemos si se trata de un GTI normal o de un GTI Performance, máxime teniendo en cuenta que las piezas que se ven en esta unidad vete a saber si le corresponden de origen o no.

El Volkswagen Golf GTI post-restyling de la séptima generación incorporaba un motor 2.0 TSI de 230 CV de potencia que se podía asociar a transmisión manual de seis velocidades o automática DSG. Su variante Performance elevaba esa potencia hasta los 245 CV. En ambos casos, este coche era bastante rápido, pudiendo acelerar de 0 a 100 km/h en poco más de seis segundos.

VW Golf GTI 7.5

Su carrocería medía 4,27 metros de largo y estaba disponible con tres o cinco puertas, además de la habitual versión Variant, aunque esta última no era asociable a la especificación GTI. Era un Golf muy bien hecho, una generación que destacó tanto por aspectos dinámicos como por la buena calidad de sus materiales.

Sin duda alguna es un coche de compra muy recomendable porque es un todo en uno. Sirve perfectamente como coche cotidiano y también para viajar porque no es en absoluto poco confortable. Su consumo en la práctica no es muy alto, pudiendo obtener unos 9,0 L/100 km con bastante facilidad.

Y además, en términos deportivos tiene cualidades para pasártelo bien al volante cuando las condiciones lo permitan. Corre, se agarra bien, tiene buen tacto… ¿Quieres uno? Pues en el mercado de ocasión puedes encontrar unidades de 2017 con menos de 100.000 km por en torno a 20.000 euros.

Síguenos en nuestras redes X, Facebook, TikTok e Instagram, o en nuestro canal de YouTube donde te ofrecemos contenidos exclusivos. Y si te apuntas a nuestra Newsletter recibirás las noticias más destacadas del motor. 

Scroll al inicio