Se llama Edgar Andrés Sarmiento, es colombiano, y ha sorprendido a todo el mundo con el «Arriero», un vehículo puramente rural en homenaje al trabajo que ha venido realizando su familia desde hace generaciones: son cafeteros en los campos colombianos.
Es un vehículo insólito, ecológico de verdad y auténtico todoterreno. El mejor ejemplo son las ruedas del coche: el «Arriero» divide cada una de ellas en dos partes: dos suspensiones individuales en la parte externa para que se adapten perfectamente al terreno. Con neumáticos Michelin, evidentemente, se regula en altura y presión, y puede transportar gran cantidad de sacos.
Su creador, diseñador industrial de la Universidad Nacional de Bogotá, ha comentado a CNN en Español que su familia «vivió en una zona cafetera al norte de Tolima, una región donde muchas de las actividades se realizan en torno al café», añadiendo al citado medio que «fue toda una experiencia que me condujo a diseñar este vehículo».
De los 875 participantes de 68 países en el «Michelin Challenge Design 2016», el proyecto «Arriero» ha levantado mucho interés en el selecto jurado de esta convocatoria de ámbito mundial. Como muestra: Nick Malachowski, Design Manager de Fiat Chrysler, David Marek, Director Creativo de Honda R&D o Thomas Sycha, Design Manager de BMW Group Design Europa, por nombrar solo algunos de los responsables de las votaciones.
Un eléctrico por el cafetal
Este segundo premio es un vehículo que se adapta a todo tipo de terreno, ya que la geografía de la zona es realmente complicada, llena de obstáculos y diferentes tipos de terrenos agrestes. De ahí las llamativas ruedas. El «Arriero lleva varios componentes que se pueden colocar según la necesidad del terreno, la carga, etcétera, cambiándose así según las exigencias del trabajo en los cafetales. Así, la altura al suelo es variable para poder superar los obstáculos típicos del campo.
La propulsión del «coche de los cafetales» se realiza a través de un sistema eléctrico (con baterías de litio) que, además, puede alimentarse a través de energía solar si es necesario. También tiene motores que generan energía cuando se frena (como en la Fórmula 1), devolviéndola al sistema de propulsión. Todo se aprovecha, y por ello también integra paneles solares y elementos piezoeléctricos.
Sobre la base de una estructura central ultraresistente, luces y suspensiones ajustables, y una silla de montar típica de la zona, el coche de Edgar Andrés Sarmiento mide 260 cm de largo y 140 cm de altura. Y es ya todo un orgullo para el mundo automovilístico bogotano.
El primer premio del certamen, dado a conocer a primeros de mes, fue para el indio Rajshekhar Dass con su «Vehículo comunal de Google», del cual hablaremos en un próximo reportaje. El resto de los 13 premiados recogerán los galardones en enero de 2016 en Detroit. Seguiremos informando.