En el transcurso del análisis sobre la incursión de los automóviles chinos en Europa, BYD, la empresa china de vehículos eléctricos, se mantiene firme y sin amilanarse. Impulsada por los alentadores resultados de ventas que ha experimentado en los últimos meses, la compañía se embarca en una decidida iniciativa para consolidar aún más su presencia en el mercado internacional.
Existen diversas alternativas que las empresas de vehículos pueden considerar para incrementar y consolidar sus ventas en distintos continentes. En el caso de BYD, a pesar de haber experimentado un crecimiento anual del 100 %, gran parte de su producción y ventas se centra en China (90 %).
Con una visión estratégica, la empresa ha tomado la decisión de avanzar en su expansión global al confirmar la adquisición de una flota compuesta por ocho buques de gran tamaño diseñados específicamente para el transporte de automóviles, que le permitan llevar a cabo una expansión global.
El encargo se ha realizado al astillero Guangzhou Shipyard International Company, y es que estos barcos desempeñarán un papel crucial, según BYD, garantizando las capacidades de transporte para las exportaciones de vehículos eléctricos. Cada barco tendrá una longitud de 200 metros y un ancho de 38 metros, con una capacidad de transportar hasta 7.700 vehículos. Estos colosos marítimos estarán propulsados por gas natural licuado (GNL) o fueloil, marcando un compromiso de BYD con opciones de energía más sostenibles.
Además, contarán con la incorporación de un sistema de baterías y dispositivos de ahorro de energía fabricado por BYD, que no solo reducirá el consumo de energía, sino también las emisiones. La construcción ya está en marcha, y se espera que los primeros barcos se entreguen a partir de 2025.

Estrategia de expansión de BYD
En consonancia con esta expansión, BYD también ha anunciado la apertura de una nueva fábrica en Europa (Hungría), programada para comenzar la producción al mismo tiempo que las entregas de los primeros barcos. Esta iniciativa refleja la apuesta de BYD por la diversificación de mercados y producción, fortaleciendo su posición frente a los cambios geopolíticos y la creciente demanda de vehículos eléctricos y solventando uno de los mayores problemas de las marcas chinas, el servicio de postventa.
A pesar de sus notables éxitos, BYD se enfrenta a desafíos logísticos al exportar sus vehículos. En el último año, las exportaciones de coches eléctricos e híbridos de BYD han experimentado un crecimiento constante. Sin embargo, estas cifras son modestas en comparación con las abrumadoras ventas internas, destacando la necesidad de una presencia más fuerte en los mercados internacionales.
En cuanto a las cifras de ventas, BYD ha alcanzado un hito significativo al vender 301.833 unidades en octubre, incluyendo un aumento del 220 % en las exportaciones en comparación con el mismo período del año pasado. Este impulso en las ventas ha consolidado la posición de BYD como uno de los principales fabricantes de vehículos eléctricos a nivel mundial.
