Toda la expedición será grabada en vídeo y con esta grabación quieren hacer una serie documental en 10 episodios sobre esta aventura e incluso un largometraje, a fin de hacer llegar a la máxima cantidad de gente posible su mensaje: los problemas medioambientales.
Los coches llevan un motor de 3,2 litros turbo y lo alimentarán con biodiesel a lo largo de los más de 1.900 kilómetros de expedición. Son híbridos enchufables –aunque no está muy claro donde quieren enchufarlos–, con dos motores eléctricos, uno en cada eje y las ruedas sustituidas por las orugas que ves en las fotos, fabricadas por Mattracks. En eléctrico, con ruedas normales, se les estima una autonomía de unos 50 kilómetros. Las baterías van instaladas en el suelo y tienen una capacidad de 24kW/hora, montadas en una carcasa aislante, algo básico para mantener la temperatura. También suspensiones, transmisión y otros componentes han sido reforzados para aguantar los 50º bajo cero que pueden llegar a alcanzar.
Uno de los dos Hummers también ha sido habilitado para arrastrar una caravana Airstream modificada, bautizada como «Snowstream». Con todo este «montaje» quieren ser los primeros en llegar al Polo Sur con un híbrido.