La decoración del Ferrari SF15-T está causando cierto revuelo entre los tifossi más puristas que ven cómo en el lateral del monoplaza de 2015 se ha sustituido el tradicional logotipo de Fiat por el de Alfa Romeo.
Y es que la presencia gráfica de Fiat en los monoplazas de Fórmula 1 comenzó cuando en 1969 Enzo Ferrari y Fiat firmaron varios convenios comerciales. Pero tras la independencia de la marca del Cavallino Rampante del grupo italiano y la vinculación histórica entre Alfa Romeo y Ferrari quizá hayan sido el detonante para que los coches de Vettel y Raikkonen ya no lleven inscrito el logo de Fiat.
No obstante, la realidad es que la nueva estrategia llevada a cabo por Sergio Marchionne intenta cumplir los objetivos de mercado apelando a argumentos comerciales y de producto, aunque ello signifique obviar elementos como historia, imagen de marca y similares. Así, el Grupo Fiat quiere posicionar a Alfa Romeo como su marca de esencia deportiva y de ahí su presencia en el preciado Ferrari sea más aconsejable.
Además, no hay que olvidar que Alfa Romeo fue la primera empresa para la cual Enzo Ferrari organizó un departamento deportivo allá por los años 20, y durante muchos años, cuando sus vehículos de competición llevaban ‘pegados’ la imagen del caballo. No obstante, cuando las relaciones se rompieron, ambas marcas llegaron al punto de odiarse, incluso cuando Fiat adquirió Alfa a fines de los 80. Pero los tiempos cambian.
