Aunque el anuncio ha sido realizado hoy y los McLaren-Honda no empezarán a rodar hasta 2015, la marca japonesa lleva bastante avanzado el desarrollo de su 1.6 V6. El presidente de Honda, Takanobu Hito, ha reconocido que los nuevos motores fueron el factor más importante que les ha hecho volver: «A partir de ahora podremos esperar una mayor transferencia de tecnología de los coches de carreras a los vehículos de serie, y viceversa: De los coches de serie a los de competición».
En 2014, la Fórmula 1 estrenará motores completamente nuevos: Los actuales 2.4 V8 atmosféricos dejarán paso a los 1.6 V6 Turbo, para satisfacer el interés de los fabricantes por investigar cómo extraer el máximo de prestaciones en motores de baja cilindrada. La nueva fórmula dará especial importancia a la eficiencia: El KERS (sistemas de recuperación de energía de la frenada) será más potente –160 CV extra- y se podrá usar durante más tiempo –33,3 segundos por vuelta-. También se recuperará energía de los gases de escape, y habrá un límite en el flujo de combustible de 100 kg de gasolina por hora. Honda se ha visto atraída por estos nuevos propulsores.
Honda ya suministró motores a McLaren entre 1988 y 1992, ganando los títulos de pilotos y de constructores durante los cuatro primeros años de dicha colaboración, con los campeones Ayrton Senna y Alain Prost como pilotos. En aquella época, los propulsores con los que competían también eran turbos… El comunicado de McLaren lo refleja a la perfección: «Para todos los que trabajan para las dos compañías, el peso de nuestros logros pasados recae en nuestras espaldas». En cambio, la última incursión de Honda en Fórmula 1 no fue tan exitosa: Entre 2000 y 2008, sólo consiguieron una victoria, y los últimos años con equipo propio fueron especialmente decepcionantes -octavos en 2007 y novenos en 2008-.