Nissan ha renovado su crossover más exitoso a nivel mundial –sí, se venden más X-Trail que Qashqai– con un patrón idéntico al empleado en el Qashqai. En el exterior se ha modificado la parrilla frontal, las ópticas delanteras y los pilotos traseros, que ahora emplean tecnología LED en su totalidad. En el interior se ha incorporado un nuevo volante, remates cromados en la palanca de cambios y nuevos tapizados.
El habitáculo del X-Trail sigue conservando un amplio espacio para las piernas en la segunda fila y se ha conseguido aumentar el volumen del maletero de 550 a 565 litros –en las versiones de 7 plazas, se mantienen los 445 litros de la anterior entrega–. Además, el nuevo X-Trail estrena la funcionalidad de apertura «manos libres» del portón trasero.
Esta actualización también ha supuesto un rediseño de la interfaz del navegador y la incorporación de un nuevo sistema de audio de ocho altavoces firmado por Bose.
Al igual que el Qashqai, el X-Trail también incorporará el conjunto de dispositivos denominado ProPILOT, que supone la primera fase del proceso de Nissan para adoptar la conducción autónoma. Este sistema controla aspectos como la dirección, la aceleración y los frenos, al circular por carril único en autopista, en situaciones de tráfico congestionado y al circular a alta velocidad. Se basa en tres tecnologías: asistente de mantenimiento de carril (LKA), control de crucero inteligente (ICC) y piloto de atascos (TJP).
El X-Trail también incorpora las nuevas tecnologías de la Movilidad Inteligente Nissan que ya probamos en nuestro primer contacto con el Qashqai, además del asistente de bloqueo (SSA).
Limitado fuera del asfalto
Que el X-Trail sea el vehículo más capaz en campo de la gama Nissan, excepción hecha del pick up NP300 Navara, da que pensar. Es indudable que resulta una excelente alternativa como vehículo familiar, muy cómodo para viajar y que permite circular por vías sin asfaltar. Pero poco más.
A la hora de afrontar desniveles pronunciados se echa en falta algún dispositivo de retención, a modo de control de descenso, que permita circular a baja velocidad sin castigar el embrague. Por ello, si se va a circular por campo con cierta asiduidad, es recomendable elegir el cambio automático CVT sobre el manual, ya que el primero sí permite rodar tan despacio como sea necesario para superar obstáculos.
Como conclusión, La combinación idónea en el X-Trail es el motor de 177 CV, con cambio automático y, obviamente, tracción total. Las siete plazas solo son recomendables si, de verdad, se van a utilizar con frecuencia. De lo contrario, mejor la de cinco.
Ficha técnica Nissan X-Trail 2.0 dCi
Motor y transmisión
Delantero transversal diesél, 4 cilindros en línea, 1995 cm3, Ø84 mm X 90 mm, 177 CV a 3.750 r.p.m., 380 Nm a 2.000 rpm; cuatro válvuolas por cilindro, dos árboles de levas en culata, inyección directa, turbo de geometría variable e intercooler
Bastidor
Carrocería autoportante; Suspensión delantera y trasera independiente, McPherson, con muelles, amortiguadores y barra estabilizadora.
Frenos: Discos ventilados delante y macizos detrás. ABS, EBD y BA. Dirección de cremallera, asistida eléctricamente. Ruedas: 225/65-17 (serie), también homologadas, 225/60 R18 y 225/55 R19.
Dimensiones: 4.690/1.820/1.830 mm; batalla: 2.705 mm; vías: 1.575 / 1.575 mm; depósito: 60 litros; maletero: 565 litros; peso: 1.675 kg
Prestaciones y consumos
Vel. máx.196 km/h; 0-100 km/h: 10,0 s; Consumo: 5,6 litros/100 km; Emisiones CO2: 158 g/km; autonomía: 1.071 km