Tras cuatro años en el mercado, el Jaguar XE recibe un restyling que le convierte en un producto más atractivo. Conserva sus principales virtudes y sus defectos, si bien en general es un mejor coche. ¿Qué tal va?
El Jaguar XE es una de esas berlinas medias de corte premium que principalmente tienen origen alemán. El XE es británico, pero está a la altura de sus competidores en todos los sentidos, siendo sus máximos rivales el BMW Serie 3, el Alfa Giulia, y también el Audi A4, si bien este último no comparte la configuración de propulsión trasera y puesta a punto deportiva del XE, Serie 3 y Giulia. Los cambios que trae este restyling en el XE afectan a lo estético y a lo funcional.
[sf_btn type=»seguros» txt=»Calcula el precio del seguro del Jaguar XE» url=»http://seguros-coche.autofacil.es/precios/coche/jaguar/xe»]
Respecto a lo estético, son nuevos los grupos ópticos, ahora más afilados y de led como equipamiento de serie. También se han renovado los paragolpes, los colores de la carrocería y las llantas, ahora como mínimo de 18″. En el interior los cambios son más evidentes. Desaparece el selector del cambio rotativo en favor de una palanca más tradicional, el cuadro de mandos es ahora de 12,3″ y digital o parcialmente digital según versiones, el volante y los mandos del climatizador proceden del I-Pace, hay recubrimientos de mejor calidad que antes y el sistema multimedia es nuevo.
En general, el habitáculo del nuevo XE es más agradable que el del antiguo modelo, si bien personalmente creo que los botones físicos para el climatizador que había antes eran más cómodos e intuitivos de manejar que los mandos táctiles del nuevo modelo, donde has de retirar más tiempo la vista de la carretera para accionarlos.
Asimismo, el equipamiento de serie es más completo que antes. Ahora, los asientos son siempre de cuero, y hay interesantes novedades como la plataforma de carga inalámbrica para teléfonos móviles dotados de esta tecnología, o el espejo retrovisor ClearSight, que incorpora una pantalla conectada a una cámara de visión angular.
No hay que confudir esta cámara con la cámara trasera para aparcar (que se proyecta sobre el sistema multimedia), sino que el sistema ClearSight está pensado para ser utilizado en condiciones de baja visibilidad, proyectando una imagen de la parte trasera mucho más nítida y con una espectacular resolución.
Cuesta 634 euros, pero es un accesorio opcional muy interesante y del que por cierto sus rivales no disponen como tal. La única pega que podemos encontrarle al interior del XE ya estaba antes de este restyling: unas plazas traseras de tamaño razonable pero que no destacan en ninguna cota, y un maletero demasiado justo: sus 450 litros no parecen dramáticos, pero la realidad es que es menos aprovechable que el maletero de un BMW Serie 3 o un Audi A4.
En la gama mecánica hay algunos cambios significativos. Al menos de momento, desaparece el motor 3.0 V6 de gasolina y también la caja de cambio manual, pero se conserva la posibilidad de escoger tracción trasera o total. De inicio, hay dos motores de gasolina y uno diésel, todos de la familia Ingenium y dotados de cambio automático de ocho velocidades. Los primeros se basan en un bloque 2.0 turbo con 250 ó 300 CV (el primero sólo con propulsión trasera y el segundo sólo sólo con tracción total), mientras que el diésel es un 2.0 turbo de 180 CV.
En marcha es donde salen a la luz las mejores virtudes del XE. Al igual que el BMW Serie 3 o el Alfa Giulia, el Jaguar XE es una berlina para amantes de la conducción, para aquellas personas que prefieren sacrificar aspectos como el mencionado maletero, a favor de una buena dinámica de conducción.
Jaguar ha mejorado la suspensión del XE y ha recalibrado la dirección, por lo que ahora en marcha es incluso mejor que antes. La suspensión absorbe muy bien las fluctuaciones del asfalto sin resultar en absoluto blanda, mientras que la dirección es muy precisa y razonablemente comunicativa. También se ha mejorado la insonorización del habitáculo. En carreteras de curvas, el XE es ágil, estable, vivaz y proporciona una gran confianza a su conductor.
La gama se compone de tres acabados, de menos a más equipado, S, SE y HSE. Además, los tres se pueden combinar con el paquete deportivo R-Dynamic. El precio del nuevo XE parte de 45.600 euros en su versión diésel de 180 CV, cifra casi idéntica a la que hay que pagar por el XE de gasolina de 250 CV: 46.000 euros.
- Lo mejor: Comportamiento y tacto de conducción, equipamiento de serie.
- Lo peor: Habitabilidad trasera sólo correcta y maletero algo pequeño.
Versión recomendada: XE 2.0 Diesel 180 CV
Motor | 4 cilindros, 1.999 cc, 4 válvulas por cilindro |
Potencia | 180 CV a 4.000 rpm |
Par | 430 Nm de 1.750 a 2.500 rpm |
Largo / ancho / alto | 4,67 m / 1,85 m / 1,41 m |
Velocidad máxima | 228 km/h |
0-100 km/h | 8,1 segundos |
Consumo mixto | 4,9 l/100 km |
Emisiones CO2 | 130 g/km |
Maletero | 450 litros |
Peso | 1.565 kg |
Cambio | Automático, 8 velocidades |
Tracción | Trasera |
[sf_btn type=»newsletter» txt=»¿Quieres recibir nuestra newsletter?Haz clic aquí» url=»https://news.luike.com/registro-autofacil-luike-news»]