Voyah Free

Hemos probado el Voyah Free, un nuevo SUV eléctrico, caro, lujoso y ¿justificable?

El Voyah Free es un recién llegado, desconocido y quién sabe si con mucho o poco que aportar. De primeras, lustroso, es.

Dirás tú, qué es eso de Voyah. Pues es una marca china de lujo del grupo Donfeng. Fue creada en 2019 y ha sido en los últimos meses cuando ha llegado a Europa y también a España. En su gama hay un monovolumen, denominado Voyah Dream, que cuesta casi 95.000 euros, y un SUV conocido como Voyah Free, que es este.

Tiene una carrocería de 4,91 metros de largo, 1,95 metros de ancho y 1,64 metros de alto. Es grande por dentro y cuenta con dos maleteros, uno principal de 560 litros y uno adicional, en el vano delantero, de 72 litros.

Estéticamente hay muchas inspiraciones en automóviles europeos, una práctica que a los chinos aún les gusta aplicar. Por ejemplo, en el Voyah Free podemos encontrar cierto parecido en su parte delantera con un Maserati, por su prominente parrilla, y en la trasera hay similitudes con el aspecto de un Porsche Cayenne. En el interior, es en cambio Mercedes la marca que parece que mas ha gustado a los diseñadores de Voyah.

Voyah Free

Sea como fuere, lo cierto es que en el habitáculo se aprecian unas calidades de muy buen nivel, tanto en plásticos como recubrimientos y tapizados, donde destaca una tapicería de piel sintética fantásticamente rematada.

Menos me gusta el excesivo protagonismo ‘pantallístico’. Tres pantallas que aglutinan muchas cosas algunas de ellas innecesariamente, como tener que recurrir a ellas para aclarar u oscurecer el techo o para abrir el maletero. Al menos, eso sí, hay mandos físicos para la climatización, buen detalle.

Hay una pareja de motores, uno por eje. El delantero es de 218 CV y el trasero de 272 CV. En conjunto, anuncian 489 CV de potencia y 720 Nm de par con los que este SUV puede acelerar de 0 a 100 km/h en 4,4 segundos y alcanzar 200 km/h de velocidad punta.

Voyah Free

Obviamente es rapidísimo, pero es un automóvil más cómodo que dinámico y que se siente mejor aplomado circulando tranquilo que rápido.

No gasta poco, unos 25 kWh/100 km, pero hay una gran batería de 107 kWh de capacidad bruta de los cuales 100 kWh son utilizables, de modo que tenemos una autonomía aproximada de 400 km en contraposición de los 500 km que anuncia la marca. Esta batería puede recargarse a 11 kW de potencia en corriente alterna y a 100 kW en continua.

Y cuesta 77.790 euros. ¿Pasta? Sí, pero no tanto en comparación con su equipamiento ni en balance con alternativas de marcas como Polestar, Audi, BMW o Mercedes, tras cuyas puertas para hacerte con algo similar a este Voyah Free tienes que rozar los 90.000 euros o, incluso, superar los 100.000 euros. El BYD Tang, por 69.900 euros, sería probablemente el rival más natural del Voyah Free.

No me compraría un Voyah Free, ciertamente, aunque entiendo a quien le encuentre su atractivo. Escenografías como un salpicadero móvil de dos alturas o una cámara de selfies es algo que gusta a muchas personas. A mí me parecen cosas poco necesarias y antepongo otras más pragmáticas.

Aparte está la cuestión de su precio. Aun costando 77.790 euros, no puede calificarse de caro en relación a lo que ofrece y la calidad que atesora. ¿Y el sentido de este coche? Es un coche eléctrico de todo uso. Vale para el día a día y, gracias a su gran batería, también para viajar sin más limitaciones que las propias de un vehículo eléctrico.

Síguenos en nuestras redes X, Facebook, TikTok e Instagram, o en nuestro canal de YouTube donde te ofrecemos contenidos exclusivos. Y si te apuntas a nuestra Newsletter recibirás las noticias más destacadas del motor. 

Scroll al inicio