La contaminación del aire tiene un impacto significativo y generalizado en la salud pública. En los últimos meses, la lucha contra la contaminación se ha convertido en prioridad para las grandes ciudades de Europa, llegando incluso a restringir el tráfico de los vehículos.
Ante este aumento de la contaminación, Tesla ha querido proteger a sus clientes con la creación de un nuevo filtro inspirado en los sistemas que se utilizan en los hospitales y la industria espacial. Se trata de un sistema de filtración HEPA, capaz de separar el aire del exterior del polen, bacterias y otro tipo de contaminación antes de que entre en la cabina y la limpieza sistemática el aire dentro de la cabina, eliminando cualquier rastro de estas partículas nocivas.
Tesla ya ha incorporado este sistema en el Model S y Model X, pero antes se realizaron todo tipo de pruebas en condiciones reales autopistas de California y también en China, uno de los países con mayor contaminación. Además, también se realizaron pruebas extremas en laboratorio.
Tesla colocó un Model X dentro de una gran burbuja con niveles extremos de contaminación. Los datos obtenidos fueron un exito, pues el sistema de filtración de Tesla se mostró cien veces más eficiente que los filtros de automoción estándar. En esta burbuja contaminada, , el sistema de filtración HEPA fue capaz de limpiar el aire del interior del vehículo en menos de dos minutos, aislando por completo a los ocupantes.
Esta respuesta es posible al modo ‘Defensa Biológica’. El modo ‘Defensa biológica’ no es estrategia de marketing, sino una cualidad real, ya que dentro de estos modelos de Tesla se puede sobrevivir a un ataque biológico de grado militar.
Por último, este sistema de filtrado también permite limpiar el aire del exterior del automóvil, haciendo las cosas mejor para los que te rodean.
