La DGT y el Ayuntamiento de Barcelona presentan, en el marco del Salón Automobile 2019, novedades en la implementación del sistema Autonomous Ready de ayuda a la conducción y preparar la ciudad para la llegada de vehículos altamente automatizados.
El Ayuntamiento de Barcelona y la Dirección General de Tráfico (DGT) han presentado, en el marco del Salón del Automóvil, los avances en la implementación del sistema Autonomous Ready de ayuda a la conducción. Se trata de dispositivos incorporados en los vehículos que permiten interpretar el entorno -señales de velocidad, presencia de peatones, ciclistas y motoristas- y proteger así a los usuarios más vulnerables del espacio público. Los dispositivos emiten información que permitirá identificar puntos de riesgo en la ciudad para la mejora de la infraestructura viaria y recoger datos para avanzar en la investigación y el desarrollo del vehículo autónomo.
El objetivo del sistema Autonomous Ready Spain es claro, reducir de forma drástica la siniestralidad en entornos urbanos y certificar el impacto positivo que la tecnología tiene en la defensa del vulnerable. Por este motivo, ya se ha implementado en Barcelona en 170 vehículos en flotas y en 79 autobuses urbanos. La ciudad se convierte así en el «airbag de la nueva movilidad», en la que la protección a los usuarios más vulnerables es la prioridad y en la que las administraciones central y local toman las medidas necesarias, no sólo poniendo las herramientas tecnológicas al servicio de una movilidad más segura, sino estableciendo incentivos y modificando la regulación.
La DGT, teniendo en cuenta que el 90% de los accidentes de tráfico son debidos a errores humanos, centra iniciativas como Autonomous Ready dentro del enfoque de «sistema seguro». Este enfoque pretende que los errores humanos, a veces inevitables, no acaben en tragedia. Persigue un modelo multidisciplinar en el que se aseguren las carreteras, el comportamiento, la velocidad y los vehículos, de modo que se logren minimizar los efectos negativos de ese error a través de las diversas capas de protección. Autonomous Ready fortalece el pilar vehículo ayudando a que las distracciones no se materialicen en un atropello o colisión, proporcionando un entorno de «seguridad indirecta» a los usuarios vulnerables que suponen a día de hoy más de 80% de las muertes que ocurren en ciudad a causa de accidentes de tráfico.
Durante este año 2019 está previsto que se instalen 530 sistemas más en vehículos de flotas y 105 en autobuses urbanos y continuar trabajando hasta implementarlo en 5.000 vehículos cuyo ámbito de circulación sea la ciudad de Barcelona.