Probamos la Ford Ranger Platinum. No es la Raptor, pero… ¡ojo-cuidao!

Hay extremos y, luego, el más allá. En el caso de la Ford Ranger, si el más allá es la versión Raptor, las versiones extremas podrían ser la Wildtrack y la Platinum de esta prueba.
En esta entrada, te explicamos como está configurada la gama Ford Ranger en España. En este caso, hemos tenido ocasión de probar la versión Platinum (aquí te dejamos la galería de nuestras fotos), que se diferencia de la Wildtrack por tener un planteamiento más lujoso y un mayor nivel de equipamiento.

Entre la Wildtrack, la Platinum y la Raptor, quizá la Platinum sea la versión menos campera por estética y por algún detalle de equipamiento. Aunque, después de probarla, eso es como decir que entre el tocino, la panceta y los torreznos, lo más light son… ¿los torreznos?
Precio | 59.653 euros |
Motor | Turbodiésel, V6, 2.993 cc |
Potencia | 241 CV / 3.250 rpm |
Par | 600 Nm / 1.750-2.250 rpm |
Cambio | Aut., convertidor de par, 10 velocidades |
Tracción | Total conectable con diferencial autoblocante trasero en opción |
Tamaño | 5,37 / 1,91 / 1,88 metros |
Peso | 2.358 kilos |
Aceleración 0-100 km/h | 8,7 segundos |
Consumo medio | 10,1 L/100 km |
Empezando por el exterior, la Ranger Platinum tiene la misma carrocería de 5,37 metros de largo que sus hermanos de gama, si bien cuenta con algunos detalles que la diferencian como una versión más pijilla, como las llantas de 20 pulgadas o algunos detalles cromados.

Quizá pensando en eso, se da la circunstancia de que el bloqueo de diferencial trasero, junto con un cubrecárter y una protección extra para el depósito de combustible, es una opción denominada paquete Off Road que, eso sí, sólo cuesta 449 euros (vamos, una miseria para un coche de 60.000 euros…) y que equipara sus prestaciones en pista en cierta forma con la versión Wildtrack.
En el interior, encontramos la misma gran pantalla central o la instrumentación digital que en la Raptor o en la Wildtrack y unos acabados bastante buenos teniendo en cuenta que este coche está pensado para que veamos siempre barro por su interior… Detrás es un coche coche muy espacioso, con unas plazas traseras similares a las de un BMW X5 en lo que a dimensiones se refiere; en confort o pijadas, hablamos de ligas diferentes.
Y, por espacio de carga, pues teniendo en cuenta que en esa caja puedes transportar un kart de competición y que te sobre sitio, pues vas más que sobrado. Y eso, salvo que vayas a transportar cosas voluminosas, no es siempre útil, pues el espacio es tan grande que es muy fácil que todo acabe volando de lado a lado. Hay algunos elementos que nos puede ayudar a separar la carga, como un divisor de la caja por 385 euros, pero no es coche ideal para dejar una mochila con un ordenador portátil o una bolsa de tomates que hayamos comprado en el súper.
También puedes optar por una persiana para cubrir toda la zona de carga. La manual sale por 1.837 euros. O mides dos metros, o mejor opta por la versión eléctrica, que sólo te costará 213 euros más. Y, teniendo en cuenta que te vas a gastar 60.000 euros, eso es una miseria, como decíamos antes.
Pero, ¿cómo va? Bien, no hace falta que te diga que comprarse una Ranger para circular exclusivamente por ciudad debería estar penado con la cárcel. Y, si sólo te la compras para moverte por carretera, pues casi que también. Porque sí, tiene un motor potente, de buena respuesta, una caja de cambios que funciona bien y el coche, pese a su altura, sus neumáticos de campo o sus 2,358 kilos, se comporta razonablemente bien incluso yendo aritmo algo alegre por carreteras viradas. En autopista, más allá del hecho de que no hay forma de bajarla de 11 L/100 km (y eso que es diésel), tampoco se defiende mal.



Pero, sin duda, donde esta Ranger va muy bien es en campo. ¿Tan bien como la Raptor? No, ésta no es una versión para casi echarle carreras a Carlos Sainz por los caminos de la Baja Aragón como la Raptor, pero en los caminos en perfecto estado va sobradísima. Conforme las cosas se van complicando, las únicas limitaciones que vamos a encontrar son las propias dimensiones de un vehículo que, con su, 5,37 metros de longitud y sus 1,91 metros de ancho, no cabe por todos los caminos. Más allá de eso, sus aptitudes fuera de pista son de lo mejor que puedes encontrar.
¿Qué si nos la compraríamos? Pues, si tuviese 60.000 euros para gastarme en un coche de este tipo, creo que no me importaría gastarme un poco más para tener la Raptor… Le veo más sentido a la versión Wildtrack, más indicada para campo que esta Platinum pero, como decíamos antes… ¿acaso los torreznos son más light que el tocino?