Hay pueblos que tienen suerte. Encontrar en La Rioja Rural buen trato y buena comida es fácil, pero si además encontramos ocio para todos, pues mejor. La localidad de Arnedillo se ubica en el Valle de Cidacos. Quizá lo más conocido de este pueblo riojano es su balneario de aguas termales que mantienen una temperatura constante de 52º.

Además de su privilegiada situación, hay que visitar la ermita de San Miguel, la iglesia de San Servando y San Germán y la de Nuestra Señora de Peñalba, considerado el edificio religioso más importante de la villa. La VW California es perfecta para moverse por estas carreteras estrechas pero que están bien asfaltadas.
Si a esto unimos la Vía verde que llega al corazón del pueblo y un paisaje increíble, pues tenemos casi de todo. En los últimos años además tenemos que unir la pasión que tienen niños y padres por los dinosaurios.
Los amantes de la película “Parque Jurásico” disfrutarán de lo lindo con el “escondite” que proponemos. Nuestra historia comienza hace 120 millones de años, en el periodo Cretácico. Por aquel entonces la cuenca alta del río Cidacos estuvo poblada por estos animales que han sido protagonistas en un sinfín de relatos.

En torno a este lugar, se ha vertebrado la Ruta de los Dinosaurios. Parece obligado creer a los científicos, porque se han conservado sus huellas que, en terminología de los expertos, se denominan “icnitas”. Resulta que estos enormes animales, al caminar sobre suelo fangoso, dejaron unas inmensas huellas que se rellenaron de un barro que tenía una composición diferente. Esto motivó su fosilización, conservándolas hasta nuestros días.
Es curioso comprobar cómo las huellas de los dinosaurios no interesaron a nadie, salvo a los científicos y a los paleontólogos. Pero.., oh! Sorpresa! Este hecho cambió con el estreno de la película de Steven Spielberg, basada en la famosa novela de Michael Crichton, “Parque Jurásico”. Un frenético amor por los dinosaurios motivó que esta ruta se pusiera de moda y que, hoy en día, acoja a miles y miles de turistas, ya que todo el que pasa por esta zona riojana se acerca. Su turismo rural es un ejemplo de cómo adaptarse a los tiempos modernos.

No muy lejos tenemos Enciso, que presume de albergar uno de los mayores atractivos paleontológicos de España y donde podremos contemplar de cerca las famosas huellas de los antiguos dinosaurios que habitaron la zona hace ya millones y millones de años. Además tiene un interesante parque temático para disfrute de todos y por la carretera que lleva hacia la cuenca del Linares también hay otros yacimientos con maquetas y simulaciones sumamente divertidas. donde la verdad, la leyenda y la propaganda medieval se juntan. Pueblos como Igea o Cornago merecen la pena para llegar a lugares espectaculares.
Algunos todavía apuestan que las huellas son del caballo de Santiago en su camino a la batalla de Clavijo. Aquí, hay versiones para todos los gustos, y cada uno se arrima al árbol que mejor le guarda. Disfrutando de unas chuletillas, unos pimientos y un vino, la siesta casi se convierte en obligación en la VW California.

Seguir el cauce del rio hacia Soria es un tramo sumamente atractivo en otoño y podemos llegar hasta Yanguas, en la provincia de Soria. Otra opción es ir hacia el norte, bajando hacia Arnedo, localidad famosa por sus fábricas de calzado y donde podemos contemplar los vestigios de su castillo árabe o sus iglesias medievales. Con tiempo se puede pasar al Valle del Alhama con pueblos perfectos para pernoctar como el abandonado Turruncu.
