Hyundai acaba de poner a la venta el Kona Hybrid, una versión con la misma mecánica de 141 CV que utiliza el Ioniq. El Hyundai Kona Hybrid completa la gama de este SUV urbano de 4,16 metros de largo y carrocería de cinco puertas.
De esta manera, la gama Kona queda formada por dos motores de gasolina de 120 y 177 CV, dos diésel de 115 y 136 CV, este híbrido con distintivo Eco de la DGT y el Kona Eléctrico, con versiones de 136 y 204 CV además de su distintivo Cero Emisiones. Por el momento, Hyundai no se plantea sacar una versión híbrida enchufable por un mero tema de mercado: no creen que haya demanda. Si la hubiese, no habría mayor inconveniente en sacar un Kona Híbrido enchufable.
El Kona Hybrid tiene, de momento, pocos rivales, siendo lo más parecido un Toyota C-HR o un Kia Niro, si bien ambos son más grandes. Sí hay otras alternativas Eco sin ser híbridas, como el Seat Arona TGI de Gas Natural.
Hyundai espera vender 8.000 unidades del Kona Hybrid en 2020, lo que supondría un total del 40% de ventas de la gama, igualado con los dos motores de gasolina.
Qué cambia por fuera
Estéticamente, el Kona Hybrid es idéntico a sus hermanos de motor térmico, salvo por las diferentes llantas -de 16 ó 18 pulgadas- y los logotipos Bluedrive en las aletas delanteras y Hybrid en el portón. La ya conocida versión eléctrica sí es diferente, con diferencias notables en la calandra delantera y las llantas, principalmente.
Cómo es por dentro
Las diferencias internas también son mínimas frente a un Kona con mecánica convencional: cambia la zona de la palanca de cambios -es automático, y con levas en el volante-, la instrumentación, la pantalla central -más grande y con el nuevo sistema Bluelink integrado, que permite analizar cosas como los datos de un viaje, averiguar dónde está el coche en cada momento…-.
Por lo demás, el Kona es un coche con un salpicadero bien resuelto desde el punto de vista ergonómico gracias a que todas las funciones principales de la radio, el climatizador, etc. se gestionan a través de unos clásicos botones de buen tamaño y dispuestos de forma lógica.
La posición al volante es buena, y se va sentado poco más alto que en un compacto. Por calidad, el Kona cumple tan bien como sus rivales, destacando especialmente por buenos ajustes.
En lo que respecta al espacio, las plazas traseras son correctas para que dos adultos viajen sin grandes problemas, o para acomodar dos sillitas de niño. El maletero tiene 361 litros, los mismo que los demás Kona a excepción del eléctrico, que se queda en 332 litros -su batería es mucho más grande que la del Hybrid-. Es un buen dato de capacidad, aunque no es de los mejores en este aspecto: un Renault Captur o un Skoda Kamiq tienen o superan los 400 litros.
Así va el Hyundai Kona Hybryd
La conducción del Kona Hybrid no requiere ningún tipo de aprendizaje para llevarlo frente a un coche automático convencional.
Empezando por la mecánica, este Kona equipa un motor 1.6 GDi de gasolina con 105 CV al que va acoplado un motor eléctrico y que, en conjunto, desarrollan 141 CV y 265 Nm de par. Emplea un cambio automático de doble embrague y seis velocidades y sólo se puede adquirir con tracción delantera.
Hay dos modos de conducción: Eco y Sport. Este último sólo se activa cuando se pone el cambio en posición manual, y también modifica levemente la respuesta del acelerador -más instantánea- y, de forma poco perceptible, la dureza de la dirección.
La respuesta es suave y muy progresiva. En modo Sport, o si se acelera a fondo, se muestra más contundente, con un buen nivel de prestaciones. Recordemos que, aunque tenga 141 CV, este Kona Hybrid también pesa 1.451 kilos -unos 140 más que un 1.0 T-GDi-.
El hecho de contar con seis velocidades le permite ser poco ruidoso y bastante refinado, uno de los aspectos más críticos en este tipo de coches sobre todo al acelerar a fondo. Además, al maniobrar es un cambio muy suave, que no transmite brusquedades, aspectos en las que también destaca cuando se maneja de forma manual. En este último modo también es suficientemente rápido, si bien prioriza siempre la suavidad.
En cuanto a consumo, la ruta de esta primera prueba ha sido principalmente por carreteras de diferentes tipos. En estas condiciones, el ordenador de a bordo se mueve en torno a 5,5 L/100 km. En ciudad, el consumo de los híbridos es más bajo, por lo que debería bajar de los 4,5 L/100 km, datos que podremos corroborar cuando tengamos una unidad para realizar nuestros recorridos habituales.
Por comportamiento, el Kona es un SUV con tacto ágil, que cambia con facilidad de dirección y reacciona con rapidez y nobleza a las posibles correcciones. En el Kona Hybrid, su mayor peso, contenido además en la parte inferior, hace que se muestre más aplomado. A ritmo normal no hay diferencia en la forma de responder en curva pero, si se fuerza el ritmo, sí cambia: ese mayor aplomo da una mayor sensación de estabilidad y control, pero las reacciones son menos vivas que en los Kona convencionales. Es, en cualquier caso, fácil de conducir, muy estable y transmite mucha confianza al conductor.
La suspensión tiene un tarado más bien firme y controla muy bien los movimientos de la carrocería. A cambio, los baches se notan más que, por ejemplo, en un Renault Captur o un Citroën C3 Aircross. Aun así, no es un coche seco, por lo que tampoco resulta incómodo en largos viajes.
El precio del Hyundai Kona
El Kona Hybrid con acabado Klass cuesta desde 26.190 euros, sin descuentos. A este precio hay que restar 1.500 euros de descuento oficial, otros 1.300 euros más si se financia la compra del coche y otros 800 euros adicionales en caso de que entregues otro coche a cambio, lo que sumaría un descuento total de 3.600 euros.
Frente a un Kona 1.0 T-GDi equivalente por acabado, la diferencia es de 4.500 euros.
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Kona Hybrid Klass 26.190 euros
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Kona Hybrid Tecno Red 29.990 euros
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Kona Hybrid Tecno Lime 29.990 euros
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Kona Hybrid Style Sky 33.090 euros
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Kona Hybrid Style Sky Red 33.090 euros
- Kona Hybrid Style Sky Lime 33.090 euros