La voz de alarma la daba la web Jalopnik, que recibía informaciones e imágenes de los vehículos que se encontraban en el Port Newark (Nueva Jersey) cuando una de las tormentas del Huracán Sandy provocó una ola que inundó el puerto. Los Karma quedaron calcinados.
Se trata de un nuevo caso de incendios en el historial del Fisker Karma, un eléctrico de autonomía extendida, es decir, que utiliza un motor de explosión para generar electricidad aprovechada por dos motores eléctricos. Los anteriores se produjeron en un domicilio de Texas y en una carretera de California. Entre ambos, en diciembre de 2011, Fisker llamó a revisión a las pocas unidades que se habían producido hasta la fecha, pero la medida se reveló inefectiva cuando sucedió el caso californiano. A continuación, Fisker se puso a investigar la zona en la que parecía que se originaban los incendios: La localizada por delante del neumático delantero izquierdo.
Fisker ha confirmado en un comunicado que nadie ha resultado herido y que ninguno de los coches estaba cargándose en el momento de la oleada, pero aduce que no ha podido entrar en el puerto para realizar más análisis, debido a que los desperfectos causados por el huracán han bloqueado los accesos. Una de las posibilidades es que la sal del agua marina provocara cortocircuitos. Hasta ahora, los incendios producidos en los Fisker Karma se han achacado a un ventilador eléctrico, pero esa causa no sirve para explicar este nuevo suceso, ya que los coches no se encontraban circulando.
