Los problemas de mecánica que están afectando a los motores PureTech de Peugeot cuentan con un nuevo episodio que nos explica un mecánico desde su taller a través de un vídeo.
En este caso, los elementos que se han visto afectados son los frenos y el mecánico nos indica las causas de estos problemas del motor 1.2 PureTech y de su correa de distribución bañada en aceite.
Comprueba el sistema de frenado y se lleva la «sorpresa»: las palas del depresor están partidas…
El vídeo que puedes ver aquí arriba y en el que el mecánico nos avisa sobre un nuevo descubrimiento que podría estar relacionado con la correa bañada en aceite de Peugeot, es del canal de YouTube Adricar Motor.
El vehículo que nos muestra en el taller el mecánico es un Peugeot 308 1.2 PureTech 130 y, como nos cuenta, «este coche tenemos un problema, este hombre se ha quedado sin frenos. Entonces, pues vamos a ver qué ha pasado, y ya está, a ver si tiene que ver algo con la correa».
En la primera comprobación que hace el mecánico quita el tubo del depresor de freno para ver si hay vacío. «El depresor de freno lo mueve el árbol de levas. Entonces va girando con una pala… una pala o dos palas o tres palas o cuatro palas… en este [coche] no sabemos lo que lleva, es posible que lleve una o dos […] Entonces, ¿qué pasa? Que a la que va girando… hace esa fuerza y se produce una succión para que tire directamente del servofreno para que esa frenada sea efectiva«, explica.
El coche tiene 157.000 kilómetros y para averiguar si el depresor de freno actúa el mecánico lo arranca, y ve que no hace vacío por lo que no funciona. Por este motivo, procede a desmontar la pieza del depresor de freno y, de esta forma, descubre que se han partido las palas y, por eso, no hace vacío.
Pero, según el mecánico, el que se rompan las palas ha tenido que pasar por alguna cosa. Tras limpiar del depresor del freno, el mecánico se da cuenta de que el tubo de engrase de la pieza está atascado; al no pasar pasar aceite y trabajar en seco la pala se ha partido.
«¿Tiene algo que ver con la correa?», se pregunta el mecánico mientras quita con un gancho lo que está obstruyendo el tubo de engrase del depresor de freno. «Mira donde sale plástico de la correa», continúa, «mira trozos de correa cómo se deshilachan. Esto es lo que le pasa al motor. La correa se va desintegrando y se reparte por todos los sitios«.
A continuación, el mecánico nos comenta el historial de ese coche que tuvo un problema de que no lubricaba y tuvieron que quitar el cárter y limpiar todo… «pero, aun así, fijaros… estos son trozos de correa«, asegura.
La ocurrencia del mecánico para ahorrar 300 euros al cliente
Un depresor de freno nuevo cuesta 300 euros, afirma el mecánico, quien señala que no va a cambiar la pieza sino que va a fabricar una pala.
«Tenemos un trocito de teflón que, al fin y al cabo, es una pala… con unos taladritos para que pase el aceite», señala el mecánico, «y vamos a ver cómo ajusta», apunta antes de meterla en el depresor de freno y hacerla girar.
Sobre esta reparación del depresor de freno el mecánico subraya. «Yo lo he hecho por amor propio para que veáis que se puede reparar, kit de reparación no hay, pero yo a este hombre le voy a hacer una reparación porque he querido».
Tras realizar el montaje de la pieza del depresor de freno reparada, el mecánico comprueba que funciona a la perfección.
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