En cualquier caso, estas cifras se reducen ostensiblemente con un uso en condiciones adversas -con mala meteorología o usando la climatización-; no obstante, BMW asegura que la nueva variante superará, en todo caso, los 200 km de autonomía. La ampliación de la batería se ha dado gracias a la mayor densidad de los elementos de iones de litio de los que está provisto dicho acumulador.
Lógicamente, el incremento de la capacidad de su batería se traduce en un aumento del tiempo de carga, que puede crecer hasta las diez horas si nuestra toma de carga es una convencional en nuestro domicilio. Asimismo, el peso del vehículo sube ligeramente, parando la báscula en 1.245 kg. No obstante, esto no le impide que sus 170 CV -mantiene la misma potencia- le empujen de 0 a 100 km/h en tan solo 7,3 segundos y de 80 a 120 km/h en 5,1 segundos.
Por último, con la llegada de este nuevo modelo, BMW ha aprovechado para actualizar su equipamiento, en el que ahora se ofrecen nuevos colores y molduras decorativas, elementos de asistencia a la conducción y el programa Retrofit, con el cual los propietarios de la versión de 60 Ah del BMW i3 pueden adaptar las nuevas baterías a su vehículo, dándole una ´nueva vida´.