La infracción que más se repite entre los conductores es la que tiene que ver con superar los límites de velocidad. Le siguen las multas por aparcamiento, incumplir la obligación del deber de identificar al infractor o no respetar señales y semáforos. También hay que destacar el aumento significativo del uso del teléfono móvil al volante. A continuación detallamos cuáles son las multas más frecuentes para los conductores y el tipo de sanción
Las multas por exceso de velocidad conllevan el pago de entre 100 y 500 euros y la retirada de entre 2 y 6 puntos del carné según la gravedad. También pueden suponer penas de prisión, trabajos en beneficio de la comunidad y la retirada del permiso de conducción.
Utilizar el móvil al volante también es una multa habitual. En el 38% de los accidentes con víctimas en 2013, la distracción apareció como causa común, según datos de la DGT. Conducir y utilizar el teléfono al mismo tiempo se considera una falta grave por la que hay que pagar 200 euros y se pierden 3 puntos del carné.
Superar la tasa de alcohol permitida se cosidera falta grave e incluso delito contra la seguridad víal. Si se superan los 0,25 mg/litro de aire espirado la multa es de 500 euros, 4 puntos y retirada del carné durante 3 meses. En el caso de los profesionales y conductores noveles la tasa se reduce a 0,15 mg/l y 0,30 mg/l, respectivamente.
Además de las anteriores, consideradas las faltas más graves hay otras acciones al volante que también son multadas de forma habitual. Saltarse un semáforo en rojo, en ámbar o señales de stop y ceda el paso acarrera una multa de 200 euros, mientras que aparcar de forma indebida, la multa más frecuente después del exceso de velocidad, ronda los 200 euros de penalización. También es importante saber que estacionar en un mismo lugar más de 16 días seguidos está castigado con una multa de 50 euros.