En diseño diferenciador, una carrocería capaz de hacerte sentir más protegida/o que en un simple turismo, espacio para al menos cuatro personas con un buen maletero, un precio razonable y un consumo bajo. Si mezclamos esos ingredientes, el resultado es lo que hoy conocemos como un SUV, esa especie de todoterreno 4×4 que ni es todo terreno ni, en la mayoría de los casos, ofrece tracción total. Sin embargo, la fórmula funciona muy bien. Tanto que, pese a su mayor precio frente a un turismo equivalente, es uno de los segmentos que más está creciendo en ventas; y eso en un momento económico no muy boyante precisamente…
El primero en apostar descaradamente por esta fórmula fue el Nissan Qashqai, y su éxito fue -y sigue siendo- tremendo, pues no en vano es el SUV más vendido en España. La mayoría de las marcas han tratado de seguir sus pasos, y eso ha hecho que firmas como Renault hayan optado por desarrollar SUV’s de otro segmento, como es el caso del Captur de estas páginas. Con una carrocería de cinco puertas y 4,12 m levantada sobre un chasis derivado del Renault Clio, este modelo no es un todo terreno; y tampoco es que lo pretenda, pues no hay más que ver que ni tan siquiera se ofrece con tracción total -aunque sí hay una variante denominada Helly Hansen que cuenta con un control de tracción más avanzado para circular por terrenos más complicados que el asfalto-.
La cuestión es… que funciona
Así que, en realidad, la parte todoterrenera de este Captur se queda sólo en el diseño de la carrocería. Sin embargo, tampoco es que eso suponga inconveniente alguno para quien esté pensando en un coche así. A su aventurera estética se añade un interior más amplio que el de un Clio -sobre todo por maletero- y con un plus de practicidad, gracias a los huecos portaobjetos que ofrece y a una banqueta trasera corrediza que da mucho juego. Además, el diseño del interior es moderno, tiene bastantes gadgets -ver Interior- y hasta el puesto de conducción es más alto que en un Clio, dando más sensación de dominio, mayor visibilidad… y, por tanto, más impresión de seguridad -aunque no sea así necesariamente-.
Tiene 90 CV. ¿Eso es poco?
Con un peso de 1.245 kilos, el Captur no es un modelo excesivamente pesado. Eso hace que el motor 1.5 dCi de 90 CV pueda moverlo con cierta soltura incluso en carretera. Aunque no es un modelo muy rápido: necesita 13,1 segundos para pasar de 0 a 100 km/h. Donde sí destaca este motor es en suavidad de respuesta, buena insonorización, bajo nivel de vibraciones y consumo, con unas cifras reales que se sitúan entre 5,0 y 5,5 l/100 km. Una forma de mejorar un poco las prestaciones sin afectar demasiado al consumo podría haber sido sustituir la actual caja de cambios manual de cinco marchas por la de seis, algo que también permitiría cambiar el tacto mejorable de esta caja por uno más agradable y preciso.
Por comportamiento, casi como un turismo
Una de las mayores pegas de los SUV’s es, aunque no lo parezca, su comportamiento en carretera. Su mayor peso y altura, además de unos neumáticos con mucho perfil y suspensiones más bien blandas, hacen que sean más torpes que un turismo equivalente debido a las mayores inercias que se generan. En los SUV’s actuales, estos problemas se van corrigiendo poco a poco, y el resultado empieza a ser bastante mejor. El Captur es un ejemplo. Balancea más que un Clio y es cierto que no se muestra igual de ágil en zonas lentas, pero yendo a un ritmo normal no hay grandes diferencias y hay que circular bastante deprisa para apreciarlas. Y, aun así, el Captur presume de buena estabilidad porque no balancea mucho, porque goza de un eje delantero y una dirección que permiten trazar con precisión y porque es muy difícil encontrarse con reacciones bruscas e impredecibles. Además, es bastante cómodo y tan sólo se muestra algo seco al pisar grietas o en asfalto muy roto. Los frenos, pese a que cuentan con unos clásicos tambores en lugar de discos en el eje trasero, están a la altura de lo que se espera de un modelo de sus caracterísitcas.
Por dinero, puedes darte el capricho
En cuanto al precio, el Captur es sólo 30 euros más caro que un Clio equivalente por motor o equipamiento, y también se sitúa en el mismo rango que rivales como el Peugeot 2008 o el Nissan Juke.
Interior: bien por ergonomía, correcto por calidad
Lo más llamativo del interior del Captur es la gran pantalla que preside la consola central -que es opcional; ver justo encima-, además de una instrumentación clara y con la información habitual que combina lo analógico con lo digital.
Calidad: El Captur emplea una plancha de plástico gomoso en la parte superior del salpicadero. En el resto, el plástico es duro y correcto sin más, dando la sensación de que quizá tenga poco grosor. Por eso, tampoco se percibe demasiado robusto. Sin embargo, en la práctica el resultado no es malo, pues no se aprecian grillos en marcha, los mandos tienen buen tacto… Por último, la plancha de plástico brillante de la consola central queda bien, pero se ensucia con facilidad -se nota enseguida el polvo o las huellas de los dedos-.
Distribución de mandos: Lo único que requiere un poco más de práctica para manejarlo en marcha es el sistema multimedia, en caso de tenerlo. Todo lo demás está bien agrupado, hay pocos botones, quedan bastante visibles y tienen un buen tamaño.
Visibilidad: Es buena hacia delante y hacia los lados, pero no tanto hacia detrás debido a la gran cantidad de chapa que hay en las esquinas traseras. Por 300e, se ofrece el pack visibilidad, que incluye cámara trasera, sensor de párking trasero y retrovisores plegables eléctricamente.
Practicidad: El interior cuenta con bastantes huecos para dejar pequeños objetos, destacando la gran guantera principal. Tiene forma de cajón -en vez de abrirse, se saca hacia atrás- y ofrece 11 litros de capacidad. Otro aspecto llamativo son las redes colocadas tras los respaldos; quedan bien y son prácticas, pero aún serían más utiles si fuesen las clásicas bolsas.
Delante: A medio camino La postura al volante es un poco más elevada que en el Clio -algo que mejora la visibilidad hacia delante-, pero algo menos que en otros SUV. Aun así, el volante ofrece unos amplios reglajes en altura y profundidad, por lo que no es complicado encontrar una buena postura de conducción. El asiento ofrece una correcta sujeción, pero podría tener un mullido un poco más firme.
Detrás: Dos van bien, pero tres… Las plazas traseras del Captur destacan por ofrecer mucho espacio para las piernas con la banqueta en la posición más retrasada -en la más adelantada, es válida para niños o sillitas; para desplazarla, hay un tirador bajo la propia banqueta, ver foto-. La anchura es justa y, además, la presencia de una pieza portabojetos sobre el túnel central, hace que utilizar la plaza central sea un tanto complicado. Por altura se sitúa en la media del segmento.
Maletero: Amplio en función de la posición de la banqueta trasera corrediza -que también se puede desplazar desde el maletero, ver foto-, y si no se utiliza el doble fondo de serie -es una plancha que se puede colocar a dos alturas-, el volumen oscila entre 377 y 455 litros, que es mucho para el tamaño del Captur. Además, sus formas son muy regulares. Sus dos mayores pegas son que la boca de carga queda un poco elevada -algo que dificulta la carga de objetos pesados- y que lleva un kit reparapinchazos de serie -hay una rueda de emergencia por 80 euros-.
¿Interesa con…
… con cambio automático? Este motor 1.5 dCi también se comercializa con una caja de cambios automática secuencial de seis marchas denominada EDC. Es de doble embrague -como las afamadas DSG del Grupo VW-, algo que le asegura un buen equilibrio entre rapidez y suavidad a la hora de cambiar de marcha. Eso sí, con ella, el Captur es más lento -tarda 13,5 seg. en pasar de 0 a 100 km/, 0,4 más que el manual- y consume más carburante -3,9 l/100 km de media en vez de 3,6-. Además, supone un sobrecoste de 1.400 euros. Por eso, sólo interesa si buscamos la mayor comodidad posible.
… con motor de gasolina? Hay dos variantes de gasolina, un 0.9 de 90 CV y un 1.2 de 120 CV, ambos con turbo. El primero es un poquito más rápido que el dCi -tarda 0,2 segundos menos en el 0 a 100 km/h- y consume más -4,9 l/100 km-, por lo que sólo es recomendable por precio -vale 1.650 euros menos que el dCi- y si vamos a recorrer menos de 10.000 km al año. El segundo, que sólo se ofrece con cambio automático EDC, interesa sólo por prestaciones: tarda 10,9 seg. en pasar de 0 a 100 km/h. Cuesta desde 18.730 euros.
El veredicto de Autofácil
El Renault Captur se coloca como una alternativa al Clio por espacio interior y por diseño, con una diferencia de precio -30 euros- que puede justificar su elección en detrimento del urbano de Renault. Por lo demás, es un coche completo al que, por ponerle alguna pega, no le vendría mal ofrecer una versión diésel más potente. Aun así, y comparado frente a sus rivales, el Captur tiene motivos suficientes como para merecerse el hecho de ser el SUV urbano más demandado.