Diferenciarse en un mercado tan competitivo como el del automóvil resulta francamente complicado. Pero en Renault lo están consiguiendo; en primer lugar con el exitoso Renault Arkana, un SUV coupé de 4,56 metros de largo sin competencia directa -el Volkswagen Taigo es más pequeño con 4,26 m.-. Por si no fuera suficiente, el Renault Austral -4,51 m.- también sobresale con soluciones inéditas dentro de la categoría de los C-SUV.
Además de los bloques gasolina 1.3 TCe Mild Hybrid 12V de 140 y 160 CV, el Renault Austral recibe las exclusivas versiones híbridas E-TECH. A diferencia de lo que hemos visto en el Renault Clio, Captur, Arkana y Mégane, el propulsor gasolina resulta mucho más avanzado. No hablamos de un 1.6 atmosférico de cuatro cilindros, sino del nuevo y revolucionario 1.2 Turbo de tres cilindros con ciclo Miller y las últimas tecnologías. Aunque mantiene la sofisticada caja de cambios multimodo, el Austral recibe una marcha adicional cuando el motor de combustión también interviene.
En resumen, tenemos el bloque 1.2 Turbo, otros dos eléctricos, la nueva caja multimodo y una batería de iones de litio de 1,7 kWh. El Renault Austral E-TECH ofrece dos escalones de potencia; el primero rinde 160 CV y ofrece una aceleración 80/120 en 6,8 segundos, mientras que el más estimulante llega a 200 CV y completa la misma maniobra en 5,9 segundos. La eficiencia es una de las bazas fundamentales de esta versión, con un gasto combinado de 4,6 litros/100 km.
Otra apuesta firme de la marca del rombo la encontramos en su faceta dinámica. Este modelo puede incorporar el sistema de cuatro ruedas directrices 4Control Advanced asociado con una suspensión trasera multibrazo. Este dispositivo, único en el segmento, supone otra novedad en la marca: ya no hablamos de un giro de hasta 3,5 grados, sino que se aumenta a 5 grados. Sin duda, esto tiene una repercusión clara en la agilidad del vehículo y en su manejo en lugares estrechos -con un radio de giro de 10,1 metros-.
El Renault Austral también se beneficia de la plataforma CMF-CD3 (como el Nissan Qashqai) y un peso contenido gracias al empleo del aluminio -capó, puertas, parte de las aletas y suspensiones…-. Lógicamente, el equipamiento se ve favorecido con un airbag central delantero, asistente a la conducción semiautónoma, cámara 360º, captores de choque lateral avanzados, faros Matrix LED, Head Up Display, Park Assist y sistema multimedia OpenR Link. Para compensar la falta de tracción total en sus inicios, la marca ofrece el dispositivo de motricidad reforzada Extended Grip.
En el aspecto práctico, el nuevo Renault Austral cuenta con unos asientos traseros desplazables para lograr la máxima versatilidad. En el mejor de los casos, el maletero cubica 500 litros y llega a 575 litros con la banqueta en la posición más adelantada.
Por último, la guinda al conjunto viene con el paquete Esprit Alpine, como un guiño a la marca deportiva. Se distingue exteriormente por la pintura bitono -con techo negro-, las llantas de aleación de 20”, logotipos especiales, paragolpes específicos y una firma luminosa trasera 3D. Para trasladar esta experiencia al interior, los ocupantes disfrutan del tapizado en Alcántara con pespuntes azules y un volante en napa exclusivo.