La compra de automóviles en subastas es un hecho que, aunque desconocido para muchos, puede traer consigo numerosas ventajas, sobre todo por el ahorro con respecto a modelos nuevos. Podemos encontrar vehículos de todo tipo, ya sean de empresas de renting, vehículos pertenecientes al Estado pero que están en deshuso o de particulares. Puede haber rebajas en el precio de hasta el 50%, por lo que es una oferta tentadora (siempre y cuando nos hayamos leído la letra pequeña).
Hay varios organismos que pueden embargar un vehículo. Principalmente hay dos tipos: públicos y privados. En el primer grupo nos encontramos con ayuntamientos, la Agencia Tributaria, la Seguridad Social o bien los Juzgados. En el ámbito privado, son los bancos y demás entidades financieras, mediante mandato judicial, quienes pueden embargar vehículos debido al impago por parte del cliente.
Ayuntamientos
Los ayuntamientos pueden embargar vehículos —ya sea por el impago de impuestos municipales o multas—. No todos comercian con automóviles, lo mejor es informarse en el propio ayuntamiento.
Si se da el caso de que sí comercian con ellos, bien el propio ayuntamiento o bien vía web, suelen indicar la fecha y el lugar de la subasta. Dichas subastas son presenciales y se requiere la identificación con el DNI, así como la aportación del 20% del valor total del vehículo.
Juzgados
Estos vehículos han sido incautados durante procesos administrativos o penales. La venta de los mismos se puede consultar en el BOE, en la web de la Administración de Justicia —www.administraciondejusticia.gob.es—, o en portales especializados como www.subastatotal.com.
Estas subastas pueden ser presenciales y online. El requisito para poder pujar es realizar un depósito del 5% del valor del vehículo.
Seguridad Social
Aquí se encuentran disponibles aquellos vehículos de quienes han contraído deudas con la Seguridad Social.
Este organismo organiza una o dos subastas al año. Las anuncia a través del BOE y de su portal web www.seg-social.es. También se puede solicitar información en el teléfono 901 502 050. Publican un listado con todos los modelos que salen a la venta ordenados por Comunidades Autónomas. Para participar hay que presentar en la Dirección Provincial de tu comunidad un sobre cerrado con una fotocopia del DNI y un papel en el que anotas la cantidad de dinero que ofreces; también hay que pagar el 25% del valor de tasación del coche.
Plan Nacional sobre Drogas
Aquellos vehículos decomisados en las operaciones antidroga son subastados por este organismo. Son las subastas que más llaman la atención, pues de todos es sabido el gusto de los narcotraficantes por los vehículos de alta gama. Aquí se pueden encontrar verdaderos chollos a precios realmente bajos. Como contrapartida, muchos de estos vehículos suelen requerir de varios arreglos, por lo que al precio pagado, habría que añadirle los gastos de puesta a punto.
Este organismo convoca subastas públicas sin periodicidad fija. Se puede acceder a ellas a través de www.pnsd.msssi.gob.es o llamando al teléfono 91 822 62 49. Cuando se publica una subasta, se otorga un plazo de unas tres semanas para que los interesados presenten en la Delegación del Gobierno para el Plan Nacional sobre Drogas la documentación requerida —unos impresos que se descargan en la propia web—, la puja y un depósito del 5% respecto al valor de tasación del vehículo.
Agencia Tributaria
Subasta coches embargados a deudores con Hacienda pero también los importados de forma irregular. Se subasta por lotes, donde se incluyen varios vehículos. Si se quiere un coche en particular, se debe comprar el lote entero.
A través del BOE, el 901 335 533, o bien en la sección de subastas de la web www.agenciatributaria.es, Hacienda informa de las diferentes subastas que se van a llevar a cabo, que dependen de cada delegación de Hacienda. Son presenciales, pero a través de firma electrónica, se puede participar a través de la web, teniendo que abonar una fianza del 20% del valor de tasación del lote.
Bancos
Son las subastas más comunes y donde más vehículos se subastan. El problema radica en que es muy mala publicidad para el propio banco, por lo que suele ser difícil conocer las fechas y los lugares de las subastas.
La mejor manera de conocer estas subastas es preguntar directamente en las sucursales. Pero volvemos a recalcar la dificultad de poder entrar en ellas. Normalmente los bancos suelen ofrecerlos a profesionales o empresas de compra-venta.