El Ford Tourneo Custom responde a la estrategia de diversificar la gama europea de turismos de la firma norteamericana para ofrecer diferentes alternativas a los automóviles convencionales. Los Tourneo Courier, Connect y Custom son la elección «furgonetera» a los segmentos de mercado tradicionales, del mismo modo que los Ford Ecosport, Kuga y Edge ofrecen alternativas todocamino (o de estética todocamino) a los convencionales Fiesta, Focus y Mondeo, y al igual que hacen también los B-Max, C-Max y S-Max desde una perspectiva monovolumen.
La principal característica de estos tres modelos es que tanto por su nivel de equipamiento como por su definición administrativa son turismos. Así, el Tourneo Custom cuenta con llantas de aleación de 16 pulgadas, faros adaptativos con proyectores de lente, aire acondicionado independiente para las plazas traseras y un completo equipo multimedia con activación por voz.
El Ford Tourneo Custom se ofrece con dos motores, dos longitudes de carrocería y un único acabado, denominado Titanium, aunque pueden elegirse opcionalmente diferentes configuraciones de asientos y otros elementos como la cámara de visión trasera y los neumáticos M+S. Bajo el capó encontraremos siempre el bloque tetracilíndrico turbodiésel de 2,2 litros, pero podemos elegir entre una versión de 125 y otra de 155 CV, en ambos casos asociado a una caja de cambios de seis relaciones y al sistema de parada y arranque automáticos. El consumo medio y los intervalos entre servicios son dos de los fuertes del vehículo, ya que el primero parte de los 6,5 litros cada 100 km, mientras que los intervalos son de 50.000 kilómetros.
Duarte Paes de Vasconcelos, director de marketing de producto, comentó que «los Tourneo están orientados a familias que buscan gran espacio, funcionalidad y versatilidad». Destacó la importancia estratégica del pequeño Tourneo Courier, ya que «se enmarca en un segmento pequeño pero en crecimiento, que tiene tres rivales mellizos (el Peugeot Bipper, el Citroën Nemo y el Fiat Qubbo), y en el que el 96 % de las ventas corresponde a versiones diésel. Aquí el motor Ecoboost de 100 CV ofrece una interesante alternativa de gasolina en este segmento». De hecho, con este motor se consigue un consumo de solo 5,2 litros cada 100 km, lo que supone que las emisiones queden por debajo de los 120 gramos de CO2 por kilómetro y el vehículo esté exento del Impuesto de Matriculación, aparte de cotizar en el tramo más bajo del Impuesto de Circulación, que varía en función de cada municipio.
Fotos del Ford Tourneo Custom
