¿Sabías que aproximadamente la mitad de los pick-up que se venden en España son Toyota Hilux? En ese segmento tan particular y minoritario es un modelo que representa una apuesta segura desde que fuera lanzado en los años 70. Su actual generación es la octava y data de 2015, si bien ha recibido algunas evoluciones en todo este tiempo.
La última es seguramente la más importante porque es la que le habilita a portar la etiqueta medioambiental ECO gracias a la incorporación de un sistema eléctrico con red de 48V y motor de 22 CV y 65 Nm.

Además del distintivo, este sistema logra reducir el consumo de combustible en un 5%, de modo que podemos estimar que oficialmente rondará los 8,9 L/100 km.
Este motor no impulsa las ruedas directamente, cosa que corre a cargo de su más que probado propulsor 2.8 turbodiésel de cuatro cilindros que mantiene sus 204 CV de potencia. Eso sí, desaparece la caja de cambio manual y ahora la transmisión es siempre automática, siendo esta de convertidor de par y seis velocidades.

Hay más novedades en la gama Hilux, como el renovado acabado GR Sport II, que sustituye al GR Sport que ya existía. Ahora luce un kit de carrocería más agresivo en el que destaca el añadido de un alerón trasero y los pasos de rueda ensanchados mediante apliques de plástico. Sus dimensiones no varían, con 5,32 metros de largo en su versión de doble cabina.

También tiene asientos deportivos tapizados parcialmente en Alcantara, cinturones en color rojo y, dinámicamente, vía delantera 15 cm más ancha, vía trasera 14 cm más ancha, 2 cm extra de altura total y frenos y suspensión de mayor rendimiento.
El renovado Toyota Hilux se pondrá a la venta en Europa a mediados de este 2024 y, aunque aún no conocemos sus precios, podemos esperar una lógica subida debido a la implementación del sistema microhíbrido. En el caso de la versión GR Sport II, dado que en la actualidad cuesta 54.500 euros, sería razonable que a partir de verano pasase a costar unos 57.000 euros. Pero veremos…
Aparte, es un modelo que se sigue integrando en la familia Toyota Professional, de modo que seguirá habiendo versiones ‘de trabajo’ más modestas, económicas y no necesariamente de doble cabina, sino también de cabina simple y extendida.
