Ya es oficial, el Grupo Volkswagen en España admite, mediante un comunicado oficial, que las irregularidades en las emisiones de CO2 afectan a 50.000 coches en nuestro país. El vicepresidente mundial de Volkswagen, Francisco Javier García Sanz, ya se ha puesto en contacto con el ministro de Industria, Energía y Turismo, José Manuel Soria, que tras la reunión mantenida con los jefes de Volkswagen ha decidido que tendrán que devolver las ayudas del Plan PIVE que han recibido.
Si el ministro de Industria mantiene su primera idea, el Grupo Volkswagen en España estaría obligado a pagar una indemnización de 50 millones de euros. El ministro Soria ha asegurado este jueves en una entrevista en Radio Nacional que primero «habrá que determinar cuántos de los 50.000 coches con exceso de CO2 recibieron la subvención».
Volkswagen AG subraya en el comunicado que los vehículos afectados son «técnicamente seguros y aptos para la circulación» y garantiza que se hará cargo de «todos los costes que pudieran derivarse de las irregularidades detectadas, incluyendo las posibles ayudas que hayan podido recibir los usuarios por los programas PIVE».
Los vehículos afectados, de las marcas Volkswagen, Skoda, Seat y Audi, son «en su mayoría» diésel -motores 1.6 y 2.0 TDI-, lo que también deja entrever que por primera vez hay coches que utilizan motores de gasolina entre los implicados -podrían estar afectadas las motorizaciones 1.4-. Lo que la compañía no especifica en el comunicado es si los 50.000 vehículos que hay en España funcionan con gasolina o gasoil, ni si se suman a los más de 680.000 que ya se habían detectado en España con las emisiones de nitrógeno manipuladas o forman parte de ese total.
Además, Soria indicó que el Gobierno había solicitado al Grupo “la devolución a los usuarios de la diferencia del pago del impuesto de matriculación” -N. de la R: desde 2008, varía del 0% al 14,75% del precio del vehículo en función de las emisiones de CO2 de ese modelo- y que “también se han comprometido a devolverlo”.