El dicho de “a buenas horas mangas verdes” bien podría aplicarse al piloto catarí Al-Attiyah quien, a última hora ha dejado en la estacada al equipo Toyota y su Hilux para alistarse en el X-Raid de los Mini ALL4 Racing para la próxima edición del Dakar. Un hecho que se repite por segundo año consecutivo cuando el año pasado también dijo no a los buggies.
Ahora bien, aunque el catarí forme parte de la estructura del equipo alemán, lo cierto es que no competirá como equipo oficial ya que su principal patrocinador, Red Bull es rival directo del sponsor de los Mini, Monster.
Pese a ello, Al-Attiyah se ha mostrado muy contento “de volver al Dakar. Gané la prueba en 2011 y parece que ha pasado un mundo desde entonces. El Dakar es una de las carreras más fascinante del mundo, una de las últimas grandes aventuras. El Mini está muy bien adaptado al terreno y, por supuesto, intentaré luchar por la victoria, aunque la oposición será muy dura».
