Es, junto al Rio y al Cee´d, una de las mayores bazas de Kia para competir en el mercado, y por eso el Sportage, a pesar de no acusar el paso del tiempo en su imagen, recibirá al principio del año que viene su nueva generación, ya que en materia mecánica sí que ha quedado algo obsoleto.
Este último dato es sumamente importante para el Sportage, al que esperamos ver en el próximo Salón de Frankfurt (Alemania) entre el 17 y el 27 de septiembre, teniendo en cuenta que cuenta con rivales de la talla del Nissan Qashqai, Renault Kadjar o Volkswagen Tiguan; unos súper ventas en el segmento.
El secretismo guardado con esta cuarta generación del SUV coreano que está a punto de llegar nos ha impedido ver un diseño final, pudiendo disfrutar únicamente de las imágenes boceto que acompañan este artículo. Lo más llamativo son unas ópticas traseras que parecen totalmente LED. En cualquier caso, el hecho de ser ´primo´ del Hyundai Tucson le otorga puntos para dar un salto de calidad similar a éste, y también se espera un diseño que destile más deportividad.
En el interior se espera un espacio ampliado gracias a la nueva plataforma utilizada, precisamente, por el Tucson, que le permite llevar su distancia entre ejes hasta los 2,67 metros. De este dato se intuye una longitud que ronde los cuatro metros y medio, con un maletero que supere los 500 litros de capacidad.
Para terminar, el nuevo Sportage equipará dos variantes de gasolina –con el mismo bloque motor TGDi de 1.6 litros y potencias de 135 y 176 cv, esta última teniendo la opción de tracción a las cuatro ruedas- y otras tres diésel –un 1.7 CRDi de 115 cv que se antoja insuficiente y un 2.0 CRDi de 136 cv que promete ser el más vendido y de 184 cv-. El diésel intermedio incluye la opción de cambio automático y tracción total, mientras que en el más potente ésta es condición sine qua non.
Kia aún no ha aireado los precios de su nuevo referente en la gama de SUV´s, pero todo indica que las versiones básicas se situarán levemente por encima de los 20.000 euros sin descuentos.
