El Lamborghini Urus forma parte de ese selecto club de los ‘súper-SUV’ de grandes dimensiones, estratosféricas potencias y altas prestaciones. Un reducto que apenas comparte con el Audi RS Q8, el Porsche Cayenne Turbo GT, el BMW X6 M, el Maserati Levante Trofeo o el Mercedes-AMG GLE 63 S. También probablemente con el Bentley Bentayga, aunque el modelo inglés se inclina más hacia el lujo que hacia la deportividad.
Presentado a finales de 2017 y lanzado en 2018, el Urus fue una reinterpretación del prototipo presentado por Lamborghini en 2012, y que reflejaba las intenciones de la marca italiana de ofrecer un SUV. Previamente, en la gama Lamborghini existió el LM002 entre 1986 y 1993, aunque se trataba de un vehículo todoterreno.
El nuevo Urus S reemplaza al Urus ‘a secas’, manteniendo la misma carrocería de 5,11 metros de largo, 2,02 metros de ancho, 1,64 metros de alto y una enorme batalla de 3,03 metros. Cambian los paragolpes, el capó (que ahora tiene unas aberturas) y hay nuevos diseños de molduras, llantas y tonalidades para la carrocería. También gana mayor grado de personalización.
Respecto a la parte mecánica, mantiene el bloque 4.0 V8 Biturbo, pero eleva la potencia en 16 CV hasta alcanzar 666 CV, idéntica cifra que el Urus Performante, versión deportiva de este modelo aligerada 47 kg mediante fibra de carbono, además de provista de un kit aerodinámico que le permite aumentar la carga aerodinámica en el eje trasero en un 38%. Lo que el Urus S no adapta del Performante es el modo de conducción Rally para derrapar sobre tierra.
Gracias a ese aumento de potencia, el Urus S ve levemente mejoradas sus prestaciones, pues ahora necesita de 3,5 segundos para acelerar de 0 a 100 km/h, cuando antes eran 3,6 segundos. Se mantienen los 305 km/h de velocidad punta.
En lo relativo al chasis no cambia mucho, conservando la suspensión neumática, los imponentes frenos carbocerámicos con pinzas delanteras de 10 pistones o el eje trasero direccional. También cuenta con un sistema de tracción total con autoblocante central de tipo Torsen, todo ello en aras de dinamizar la respuesta de un vehículo de 2.272 kg de peso.
El precio del nuevo Urus S es de 265.443 euros (296.596 euros en el caso del Performante), por lo que es claramente más caro que cualquiera de sus rivales. Tan sólo el Porsche Cayenne Turbo GT se acerca un poco a esas cifras, con un precio de 237.734 euros.
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