Hasta ahora, existían grandes diferencias entre un Audi Q3 y un Audi Q5 pero, con la segunda generación del SUV compacto, la distancia entre ambos se ha reducido. La evolución con respecto a su predecesor es notable, y ahora se parece más a sus hermanos mayores, especialmente al Audi Q8, con el que comparte tecnología y diseño.
El nuevo Q3 utiliza la plataforma MQB -la misma que los Audi A3 o Volkswagen Golf– en lugar de la anterior PQ35. Gracias a ello es más ligero y está preparado para montar los últimos avances de la marca, desde mecánicas híbridas hasta los más avanzados sistemas de asistencia a la conducción. Pese al aumento de tamaño, la reducción de peso y la mayor eficiencia de las motorizaciones disponibles le permiten ser más eficiente que el modelo anterior y, sobre todo, que sus rivales. Con todo, la oferta mecánica es algo escasa de inicio y se echa en falta un propulsor electrificado, aunque llegará dentro de unos meses.
A lo que es difícil poner un pero es al interior. Los materiales empleados son de más calidad y sus ajustes son excelentes. Su aspecto es similar al de los últimos modelos de la marca, con la instrumentación digital y una enorme pantalla central como grandes protagonistas. Por fuera también hereda algunas de las soluciones empleadas en los modelos más grandes de Audi, como los faros de led más afilados, la parrilla frontal octogonal o los enormes pasos de rueda que, unidos a la parte inferior de la carrocería en color negro, realzan su carácter campero.
El interior sigue el mismo patrón que el de los lanzamientos más recientes de Audi: instrumentación digital -de 10,25″ o 12,3″-, pantalla táctil central integrada en el salpicadero -de 8,8″ o 10,1″- y todos los mandos orientados hacia el conductor. Los materiales empleados tienen muy buena calidad y, en función del acabado, puede incluir iluminación ambiental personalizable, tapicería de cuero o molduras de madera. La postura al volante es cómoda, aunque algo elevada, incluso con los asientos deportivos del acabado S-Line.
[sf_btn type=»seguros» txt=»Calcula el precio del seguro del Audi Q3″ url=»https://seguros-coche.autofacil.es/precios/coche/audi/q3″]
La habitabilidad es buena y las plazas traseras son más amplias que las del modelo anterior, si bien el asiento central dispone de menos anchura, por lo que sólo es recomendable utilizarlo en trayectos cortos o para niños. En cambio, hay mucho espacio para las piernas, aunque esto tiene truco, ya que las butacas posteriores pueden inclinar su respaldo y desplazarse 15 cm longitudinalmente para ampliar el maletero o permitir que los pasajeros viajen con más espacio para las piernas.
En función de cómo estén colocadas las plazas traseras, el maletero ofrece un volumen mínimo de 530 litros o un máximo de 675 litros. Los respaldos se pueden abatir en tres partes -40:20:40- y, cuando están completamente plegados, el maletero aumenta hasta los 1.525 litros. Sus formas son regulares, tiene doble fondo, el suelo puede configurarse en tres posiciones y dispone de una generosa boca de carga. En opción, el portón puede ser eléctrico y abrirse pasando el pie por debajo del paragolpes.
Conectividad
Con el acabado básico, el Q3 ya incluye la instrumentación digital con pantalla de 10,25″ y el sistema de infoentretenimiento MMI radio plus con pantalla táctil central de 8,8″. El MMI Navegación Plus sustituye el panel central por uno de 10,1″ y añade los servicios conectados de Audi. Cualquiera de los dos sistemas es compatible con Apple CarPlay y Android Auto mediante la aplicación My Audi app. La carga inalámbrica para móviles es opcional.
Así va el Audi Q3
Con 150 CV, la versión de acceso -35 TFSI- tiene una buena respuesta y mueve al Q3 con soltura -tarda 9,2 segundos en pasar de 0 a 100 km/h-. Este motor sólo se ofrece con tracción delantera y cambio automático S-Tronic de siete velocidades y doble embrague, que sigue destacando por suavidad y rapidez. Debido al menor peso de la tracción simple y a la tecnología que desconecta dos de los cuatro cilindros cuando se le exige poco al acelerador, el consumo es muy contenido. En la práctica es fácil obtener una media de unos 6,5 L/100 km; en carretera y a velocidad sostenida se puede rebajar a menos de 6,0 L/100 km.
Se comporta mucho mejor que su predecesor. Además de ganar aplomo, resulta más ágil y da la sensación de conducir un coche menos voluminoso. La suspensión es más bien dura, pero no seca, ya que absorbe muy bien los baches e irregularidades. La dinámica de conducción puede mejorar con las dos suspensiones opcionales: una deportiva -Sport- más firme y otra adaptativa.
La altura libre al suelo es de apenas 14 cm y sus neumáticos son principalmente de asfalto, por lo que sus cualidades fuera de carretera se limitan a caminos y pistas en buen estado.
Asistencia a la conducción
El Q3 incluye lo último en materia de sistemas de asistencia. Entre otras cosas, puede equipar en opción el asistente de conducción adaptativo, compuesto por un control de velocidad adaptativo, el Audi Traffic Jam Assist, para circular auomáticamente en atascos y retenciones, y el sistema de mantenimiento de carril. También está disponible el asistente de aparcamiento Audi park assist, el de tráfico cruzado, o las cuatro cámaras de 360 grados que proyectan la grabación en la pantalla central del interior. Tampoco faltan sistemas habituales en un modelo de este segmento, como el reconocimiento de señales de tráfico, la conexión automática de luz larga, la frenada de emergencia con detección de peatones, objetos y ciclistas o el aviso de cambio involuntario de carril.
- Lo mejor: Interior amplio y de gran calidad. Buen comportamiento y consumo muy contenido.
- Lo peor: Será caro y todavía no está disponible con motorizaciones híbridas.
