Los coches de segunda mano en España pueden ocultar historias sorprendentes, desde múltiples matrículas internacionales hasta accidentes millonarios. Según un análisis de carVertical, empresa especializada en datos de automoción, el mercado español ha registrado algunos de los casos más llamativos entre enero y agosto de 2024.
Un Renault Mégane, el viajero del mercado de coches de ocasión
Entre los vehículos analizados, un Renault Mégane de 2009 se llevó el récord de matrícula internacional tras haber sido registrado en seis países diferentes. Este caso refleja la alta movilidad de algunos vehículos usados, que cambian de manos y países constantemente. Otros coches destacados por sus viajes incluyen el BMW Serie 5 de 2014 y el Audi S3 de 2015, ambos con cinco matrículas internacionales.
Por otro lado, los modelos que más cambiaron de propietario en España fueron el Nissan Pathfinder de 2006 y el Volvo V70 de 2011, cada uno con 15 dueños registrados. Este tipo de historial puede ser un indicativo de problemas mecánicos recurrentes o falta de satisfacción por parte de los propietarios.
Accidentes y daños millonarios en coches de segunda mano
Los modelos premium son protagonistas en términos de daños costosos. El récord de reparaciones en España lo ostenta un Audi RS Q3 de 2022, con un total de 190.000 euros en daños acumulados, una cifra equivalente al precio de una vivienda en algunas localidades.
Otros vehículos destacados incluyen un Audi RS4 de 2021, con más de 95.000 euros en daños, y un Mercedes Clase C de 2018, que alcanzó los 72.500 euros en costes de reparación.
En cuanto a frecuencia de accidentes, un Mercedes Clase E de 2017 registró siete colisiones. Este tipo de vehículos, aunque atractivos por su diseño y rendimiento, pueden implicar altos costes de mantenimiento y reparación.
Kilometraje extremo y manipulaciones preocupantes
Un Renault Master de 2013 encabeza la lista de vehículos con mayor kilometraje registrado, alcanzando los 798.561 kilómetros. Este dato refleja una media anual de más de 79.000 kilómetros recorridos, un uso intensivo que lo convierte en un veterano de las carreteras.
Sin embargo, no todos los cuentakilómetros cuentan la verdad. El caso más grave detectado fue el de un Mercedes Clase C de 2017, cuyo kilometraje fue reducido en 230.000 kilómetros. Otros ejemplos incluyen un BMW Serie 7 de 2016, con una manipulación de 197.200 kilómetros, y un Mercedes GLC de 2017, con 181.000 kilómetros menos en el registro real.
Matas Buzelis, jefe de comunicaciones de carVertical, señala que «comprar un coche con un kilometraje manipulado por cientos de miles de kilómetros va a acarrear muchos problemas. Está claro que un modelo de este tipo ya no será fiable y se estropeará con frecuencia».
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