Una de las mayores herramientas que permiten reducir costes de fabricación a los grupos automovilísticos son las sinergias que se crean en el desarrollo conjunto de ciertos elementos. Por ello, Toyota y el Grupo PSA, que ya trabajaron codo con codo en los Toyota Aygo, Citroën C1 y Peugeot 108, o en la fabricación de motores diésel, llegan con un nuevo vehículo que continúa con el acuerdo de colaboración firmado por ambos en 2012.
Este se llamará, respectivamente, Citroën Spacetourer, Peugeot Traveller y Toyota Proace, y llega para cubrir necesidades tanto personales –versiones Combi– como comerciales para un uso profesional –versiones Shuttle-. Hasta ahora, el Proace estaba basado en los Peugeot Expert y Citroën Jumpy existentes en aquel momento, pero el desarrollo común de una nueva generación se extendería hasta pasado el año 2020.
Los nuevos modelos, que se fabricará en la planta que PSA posee en Valenciennes –Francia-, compartirán características técnicas y motorizaciones, no obstante, el equipamiento será independiente en cada marca. Su presentación tendrá lugar en el Salón de Ginebra, que se celebrará a principios de marzo del año que viene, y la comercialización se espera para antes de que finalice el primer semestre de 2016.
