El escándalo de la manipulación de emisiones destapado en septiembre del año pasado no le ha costado al Grupo Volkswagen ‘únicamente’ un buen puñado de millones, sino también una mancha importante en su reputación. Más de un año después, el asunto todavía sigue ‘trayendo cola’, y la última información sobre ello es que el consorcio alemán no venderá vehículos con motor diésel en los Estados Unidos durante lo que queda de este año y todo el 2017. Recordemos que Volkswagen está recomprando a los propietarios de coches diésel -si éstos lo desean- sus automóviles en Norteamérica.
La decisión tomada por el Grupo Volkswagen es firme, y puede significar el inicio de una comercialización que nunca vuelva si tenemos en cuenta el desarrollo de los coches con motores que funcionan con combustibles alternativos. De hecho, la propia compañía de Wolfsburgo está desarrollando modelos globales ya no solo híbridos, sino eléctricos. El mejor ejemplo lo tenemos en el prototipo I.D. Concept, recién presentado en el Salón del Automóvil de París 2016: se trata de un compacto que podrá recorrer entre 400 y 600 km con una sola carga y el cual está previsto que inicie una futura gama de Volkswagen con motor eléctrico.
Lo cierto es que las ventas del grupo en Europa, y más concretamente en España, no se han visto para nada alteradas negativamente; no así en los Estados Unidos: la gran mayoría de matriculaciones de la compañía en el país norteamericano en lo que va de año han correspondido a coches con un propulsor gasolina o híbrido.
