A lo largo de los últimos meses, BMW nos ha sorprendido especialmente con dos modelos deportivos que se presumen importantes dentro de la estrategia de la firma bávara durante los próximos años. Uno es del BMW Z4 Concept y otro es el BMW Serie 8, que se encarga de tomar el relevo del Serie 6. Por lo tanto, este último modelo será un Gran Turismo que se comercializará con tres carrocerías distintas: Coupé, Cabrio y Sedán -al igual que sucede con el todavía vigente BMW Serie 6-.
Lo cierto es que el nuevo BMW Serie 8 no mantendrá la esencia del deportivo homónimo que la marca germana vendió en la década de los años 1990, si bien tendrá un motor muy potente y sus capacidades dinámicas estarán fuera de toda duda. Aun así, como hemos comentado, se tratará de un Gran Turismo más que de un modelo deportivo. Para ponernos en perspectiva, uno de sus mayores rivales en el mercado será el grande y lujoso Mercedes-Benz Clase S en sus variantes Coupé y Cabriolet.
Y a pesar de su aspecto completamente futurista, el desarrollo de este modelo está tan avanzado que se espera que su puesta a la venta tenga lugar ya el año que viene, en 2018. Su fabricación tendrá lugar en la planta que BMW posee en Dingolfing, en Alemania. Mientras tanto, su gama mecánica todavía es una incógnita, pero se espera que comparta un buen número de motorizaciones con el actual BMW Serie 7 -cuenta con propulsores híbridos, gasolina y diésel de entre 265 y 610 CV-.
En cualquier caso, BMW aún no ha desvelado si los entusiastas de la división deportiva M podrán adquirir una versión de este tipo con este modelo. De todas formas, en caso de no llegar a producción la variante más potente podría ser un 860i con una potencia que ronde los 700 CV, lo cual debería ser más que suficiente para dotar a este Serie 8 de unas prestaciones y un comportamiento de infarto.
