BMW Z4: un deportivo divertido y a buen precio

Con la llegada de la nueva y tercera generación del BMW Z4, el primer modelo de esta saga se está convirtiendo en un apetecible clásico moderno. Es un automóvil francamente divertido de conducir, y su precio actual es muy tentador.

El BMW Z4 supuso un gran salto de calidad respecto al Z3 en todos los sentidos. El Z3 se comercializó de 1996 a 2002, y respecto a este, el Z4 presentaba un diseño más contemporáneo -obra del diseñador danés Anders Warming-, una mayor calidad de materiales, mejor confort de marcha y, sobre todo, una conducción más eficaz y menos exigente con las habilidades del conductor.

El Z4 fue desvelado en el Salón de París de 2002, y su producción se llevó a cabo en Carolina del Sur –EE.UU.–, comenzando su comercialización en dicho país en noviembre de ese mismo año. Su llegada a Europa se retrasó hasta marzo de 2003.

Al igual que el Z3, la carrocería de la primera generación del Z4, conocida internamente como E85 y de 4,09 metros de longitud, lucía un capó muy largo, capota de lona -de accionamiento eléctrico de serie-, un corto voladizo posterior y los clásicos riñones de BMW como parrilla frontal. Por dentro, presentaba un aspecto bastante adelantado a su tiempo, con líneas fluidas, un voluminoso salpicadero y una gruesa consola central.

En cuanto a la gama de motores, todos fueron de gasolina, y de inicio sólo de seis cilindros: un 2.2i de 170 CV, un 2.5i de 192 CV y un 3.0i de 231 CV, todos ellos con cambio manual o automático, y los dos últimos con la opción de elegir entre dos cajas automáticas: una de convertidor de par y cinco marchas, y otra robotizada de seis velocidades. En 2005, se incorporó a la gama el único bloque de cuatro cilindros: un 2.0i de 150 CV y transmisión manual.

En 2006, un restyling renovó los grupos ópticos y los paragolpes y eliminó el motor 2.2i. Además, los de seis cilindros fueron totalmente renovados con una nueva familia mecánica que se componía de un 2.5i de 177 CV, un 2.5si de 218 CV, un 3.0si de 265 CV y una versión Z4 M 3.2 de 343 CV.

En 2008, llegó la segunda generación del Z4, no sin que antes, en 2007, se presentara un Z4 Coupé -E86- de carrocería cerrada. Hoy en día, el primer Z4 es una asequible alternativa como roadster de segunda mano.

Cómo iba en marcha el BMW Z4

El predecesor del Z4 ya era un coche estimulante y divertido de conducir. Aquel Z3 ofrecía todo lo que debía tener un coche lúdico, pero el Z4 multiplicó todas sus virtudes. En carreteras de curvas, que es donde mejor se desenvuelve, se mostraba más rígido, eficaz, ágil y con reacciones más sencillas e intuitivas de controlar. Asimismo, presentaba un mayor aplomo y resultaba más cómodo para usar en el día a día a ritmo tranquilo.

El motor más apetecible por su gran rendimiento y su elástica entrega de potencia es el 3.0i de 231 CV. No obstante, el que mejor se vendió en nuestro país es el 2.0i de 150 CV, que se presentó en 2005 y que, aunque no corre tanto como los otros motores de la gama, sí ofrece unas prestaciones correctas: pasa de 0 a 100 km/h en 8,2 segundos y consume unos razonables 7,5 litros/100 km.

¿Cómo era el BMW Z4 por dentro?

Las mayores dimensiones del BMW Z4 respecto al Z3 repercutieron en un habitáculo más espacioso, donde dos adultos pueden viajar con comodidad incluso si miden más de 1,85 metros de alto. La postura de conducción, casi a ras del suelo, es muy deportiva, y los reglajes del asiento y del volante, este último tanto en altura como en profundidad, facilitan sentirse cómodo. El maletero, por su parte, era de los más amplios de su categoría con 260 litros de capacidad -que se quedaban en unos razonables 240 litros con la capota plegada-, si bien sus formas interiores eran poco regulares.

La calidad de materiales que presenta el voluminoso salpicadero, con bastante plástico blando, era muy elevada en comparación con la mayoría de sus rivales, donde apenas el Audi TT Roadster y el Porsche Boxster estaban a su altura. Además, la colocación de todos los mandos resulta intuitiva.

¿Qué revisar en un BMW Z4 de segunda mano?

Todos los motores de la gama presentan una gran fiabilidad. Tan sólo se han dado algunos problemas mecánicos en el Z4 M de 343 CV, pero el resto de propulsores son muy robustos, especialmente los de seis cilindros. No obstante, sí es importante que revises que el diferencial no produce ruidos, que no existen holguras en la dirección, y que la capota funciona bien: tanto el motor que la acciona como que no filtre aire o agua al interior.

¿Cuánto cuestan sus repuestos del BMW Z4?

¿Cuánto cuesta mantenerlo?*

Las revisiones del BMW Z4 no están estipuladas según los kilómetros. En su lugar, es el propio ordenador de a bordo el que informa al conductor de en qué momento es necesario pasar una revisión. Existen dos tipos de inspecciones: la básica -I- y la más exhaustiva -II-. En cuanto al coste de los recambios, a excepción de los amortiguadores, no son dramáticamente caros. Además, el hecho de que el motor lleve distribución por cadena te ahorra el cambio de correa.

*Fuente: GT

Cuánto valía… y cuánto vale

• En 2003, el BMW Z4 2.2i 170 CV costaba 35.900 euros, y su valor actual es de 9.000 euros con 150.000 km aprox.

• En 2003, el BMW Z4 3.0i 231 CV costaba 47.300 euros, y su valor actual es de 12.500 euros con 140.000 km aprox.

• En 2006, el BMW Z4 2.0i 150 CV costaba 34.300 euros, y su valor actual es de 10.000 euros con 125.000 km aprox.

• En 2003, el BMW Z4 3.0si 265 CV costaba 47.400 euros, y su valor actual es de 14.500 euros con 100.000 km aprox

Ficha técnica. BMW Z4 3.0i de 2003