Duda en la compra del nuevo Renault Clio. ¿Híbrido o de gasolina?

La verdad es que no sé ni por dónde empezar. Me encanta el nuevo Renault Clio y, además, mi experiencia pasada con Renault es buena, de manera que me aporta confianza. El caso es que acudí yo contenta a una concesión de la marca directa para encargar uno y salí ‘con la cabeza como un bombo’. El comercial me explicó bien todo, pero el problema es que el asunto es más complejo de lo que yo creía.

El caso es que no sé si comprar la motorización de gasolina o la que llaman E-Tech, que es la híbrida. En principio iba con la idea de la segunda, pero en el concesionario me di cuenta de que por algo menos de dinero podría acceder a la de gasolina y, encima, con el acabado Esprit Alpine, que me parece chulísimo. Entonces, mi duda está en si encargar el de gasolina con terminación Esprit Alpine, o la hibrida con el más sencillo acabado Evolution.

Utilizo el coche a diario para ir a trabajar, recorriendo unos 13 km entre ida y vuelta por circunvalación. Y los fines de semana casi siempre me voy a mi pueblo, lo que son unos 400 km entre ida y vuelta por autopista. Para mis trayectos personales por ciudad, suelo utilizar los servicios de motosharing. ¿Cómo lo veis vosotros? R. T. (Madrid)

Renault Clio: Respuesta de la redacción

Entendemos tu disyuntiva aunque, para nosotros, la elección más adecuada está clara y ahora te la desvelaremos. La diferencia entre los dos Clio que propones está en que las ventajas de cada uno de ellos se dan en circunstancias distintas.

Comencemos por el híbrido, que es el que inicialmente te interesaba. Hay dos principales virtudes en él. Una es que porta la etiqueta ECO y la otra es que en trayectos urbanos gasta poquísimo. Gracias a que su batería es de 1,2 kWh (bastante para ser un urbano híbrido no enchufable), circula bastante tiempo en modo eléctrico y puedes obtener consumos reales en ciudad que ronden los 4,0 L/100 km.

Por su parte, el TCe de gasolina es una versión más modesta en todos los sentidos. Tiene un motor 1.0 turbo de tres cilindros que desarrolla 90 CV, lejos de los 145 CV que produce la combinación del híbrido (un propulsor 1.6 de gasolina de 94 CV más dos eléctricos de 49 y 20 CV). Por eso, sus prestaciones son más limitadas, aunque anda más que de sobra.

Sin embargo, es esta variante de gasolina la que opinamos que cuadra mejor con el uso que le vas a dar al vehículo. ¿Por qué? Pues porque fundamentalmente no vas a conducir por ciudad, de manera que no vas a aprovechar las ventajas de un híbrido, que no se dan precisamente en carretera.

La versión de gasolina nos resulta más agradable de conducir en carretera, donde además puede llegar a consumir en torno a un 10-15% menos que el híbrido. También, gracias a que no tiene parte eléctrica, disfruta de un maletero mayor: 340 frente a 254 litros.

Y luego está el asunto del acabado, otro punto a favor teniendo en cuenta que dices que la terminación Esprit Alpine te resulta atractiva. Sobre el Evolution añade climatizador, alerta de tráfico cruzado trasero, sensor de ángulo muerto, control de velocidad adaptativo, modos de conducción, cámara posterior, cuadro de mandos digital de 10″, pantalla central de 9,3″ con navegador, botón de arranque, lunas sobretintadas, pilotos traseros led 3D, carga inalámbrica para smartphone, pedales de aluminio, tapicería específica, llantas de 17″ y un vistoso kit de carrocería.

Teniendo en cuenta todo, y a pesar de que el Clio E-Tech ofrece mejores registros en casi todos los apartados frente al Clio TCe, nosotros creemos que el uso al que vas a destinar a tu nuevo Clio encaja mejor con el segundo, permitiéndote además ahorrarte cierta cantidad de dinero al mismo tiempo que disfrutar del acabado que realmente te atrae.