La llegada al mercado de los coches autónomos no servirá solamente para que aquellos a los que no les agrada excesivamente ponerse detrás del volante se sientan más cómodos. Su puesta en escena también permitirá automatizar una serie de servicios gracias a su tecnología. Un buen ejemplo de ello es la colaboración entre el fabricante norteamericano de vehículos Ford y la cadena de pizzerías Domino’s Pizza: ambos quieren que un vehículo sin conductor te entregue tu pizza en la dirección que desees.
Este proyecto ya se encuentra en fase de pruebas en la localidad estadounidense de Ann Arbor, en el estado de Michigan. Las pruebas durarán unas cinco semanas y, en ellas, las dos empresas tratarán de evaluar las reacciones de una serie de clientes al azar que recibirán sus pedidos en un coche autónomo. Concretamente, en el Ford Mondeo con esta tecnología de conducción con el que la compañía americana lleva ya aproximadamente cuatro años realizando comprobaciones.
Durante las primeras entregas, en el interior de la berlina irá montado un ingeniero de seguridad para verificar que todo transcurre de la manera prevista. Aquellos clientes que, seleccionados aleatoriamente, reciban la pizza en el vehículo autónomo, podrán realizar el seguimiento de su pedido a través de GPS gracias a la aplicación para dispositivos móviles Domino’s Tracker. Por su parte, la recogida de la pizza se hace abriendo la ventanilla trasera, algo que solo se podrá llevar a cabo mediante la introducción de un código en una pantalla ubicada en el pilar C del automóvil.
Por el momento, la única ‘laguna’ que aprecian desde Domino’s Pizza es el hecho de obligar al cliente a salir de su hogar, teniendo que desplazarse para recoger la pizza en el coche. En cualquier caso, el experimento ha sido avalado por Christopher Taylor, el alcalde de Ann Arbor, y servirá a Ford para seguir puliendo su tecnología de conducción autónoma.