La versión eléctrica del Kia Soul se lanzó en 2014 y, desde entonces, no ha recibido ninguna modificación. En 2019, se presentará una actualización con 30 kWh de batería -3 más que actualmente-. Desde finales de 2018, convivirá con el Kia Niro EV, que se presentará en la segunda mitad de este año y que se ofrecerá con dos niveles de potencia y autonomía. El Niro EV equipará una batería más grande, con alrededor de 50 kWh, pero también será más pesado que el Kia Soul EV que, gracias a sus 4,14 metros de largo, es mucho más compacto y, por tanto, más maniobrable en entornos urbanos.
A pesar de llevar cuatro años en el mercado, la calidad del interior es muy buena -mucho mejor que la del Nissan Leaf y en línea con la del Volkswagen e-Golf-. También es buena la relación entre dimensiones y habitabilidad, ya que aprovecha muy bien el espacio interior y cuenta con cinco plazas reales, además de tener un maletero con un volumen de carga correcto -354 litros-. A los puntos fuertes del Kia Soul EV hay que añadir la garantía oficial de siete años proporcionada por Kia.
¿Es suficiente su autonomía?
En el lado negativo, cabe señalar que solo tiene 27 kWh de batería, por lo que se sitúa a la cola de los eléctricos de su categoría en cuanto a capacidad… y también en autonomía. Según Kia, puede recorrer hasta 212 kilómetros con una carga de su batería de iones de litio, pero, ¿es real esa cifra? Después de probarlo, podemos contestar a la pregunta y su autonomía real es de 185 kilómetros. Como decimos, más adelante llegará una batería de 30 kWh de capacidad que homologará una autonomía de 250 km.
Más allá de su autonomía, el precio puede ser un inconveniente para algunos clientes, sobre todo si optan por la versión con toma para recarga rápida de tipo CHAdeMO, que conlleva un sobreprecio de 3.250 euros.