No todo iban a ser consecuencias malas para el sector automovilístico después de lo ocurrido con el ´Caso Volkswagen´. El escepticismo creado alrededor de las mecánicas diésel va teniendo poco a poco respuestas por parte de los diferentes fabricantes a través de la publicación de unos datos más acordes con la realidad en lo referente al consumo medio homologado de combustible y a las emisiones de gases contaminantes a la atmósfera.
Así, tras el anuncio del Grupo PSA Peugeot Citroën de la divulgación de sus números reales en este sentido, Opel se ha unido a esta cruzada y difundirá sus cifras para eliminar falsas creencias sobre sus motores de gasóleo -comenzará por el Astra 2016-. Éstas irán acordes con el nuevo ciclo de homologación WLTP –entrará en vigor en el año 2017-, que aun realizándose sobre rodillos prometen ser más fiables que el programa actual, el NEDC. Lo que no han aclarado ha sido si lo harán mediante una auditoría interna o independiente –como PSA-.
Además, actualizará aproximadamente 43.000 modelos, homologándolos y reduciendo sus emisiones acorde con la normativa Euro 6 mediante urea o AdBlue, algo que vendrá de serie en los nuevos modelos a la venta. De hecho, Opel se ha desmarcado completamente de las acusaciones de no cumplir con la ley, poniendo en duda la claridad de las pruebas con las que se les incriminó.