Nissan Qashqai (2007) 2.0 DCI Acenta 4X2

Motivos suficientes para que en Autofácil nos decidiéramos a hacer una prueba de la nueva versión turbodiesel 2.0 dCi, la más cara y potente de la gama, la última que acaba de incorporarse a la gama y también la que más están solicitando los que quieran un Qashqai. ¿Nuestro objetivo? Conocer las claves de éste -digamos- inesperado éxito… y dictaminar si, realmente, es un modelo que se merece ‘lo que le pasa’… o tan sólo es una moda pasajera.

¿Cuál ha sido el primer gran acierto del Nissan? Desde el punto de vista del diseño, ofrecer lo que la gente quiere; si sólo pudierámos explicarlo ‘con un metro en la mano’ diríamos que al público le gusta la fórmula de poder disfrutar de un coche de longitud compacta -4,3 metros, es decir, como cualquiera de los Mégane, Focus, Golf, Astra…- combinado con la altura propia de un monovolumen y todo camino -1,6 metros-.

Otro acierto del Qashqai es haber dotado a su carrocería de un aspecto robusto, con grandes ruedas, una altura al suelo elevada, una parte inferior con protecciones en plástico negro… Resumiendo: la fórmula ha gustado; lo que no sabríamos decir es por qué otros modelos de concepto similar, lanzados pocos meses antes que este Nissan -VW CrossGolf, Dodge Caliber- no han conseguido despertar tanto el interés en la gente como el Qashqai.

Por eso vamos a seguir escudriñando qué tiene este japonés para estar en boca de todos. Subimos al interior; el acceso es mejor que en la media, y lo mismo se puede decir de la sensación de amplitud o calidad.

Pero, en realidad, sólo es eso: sensación. Una vez que coges la cinta métrica o sacas ‘la lupa’ para ver al detalle los acabados del coche, te das cuenta de que en ambos aspectos cumple… pero que no dejaría muy atrás, por ejemplo, a un VW Golf o a un Ford Focus.

Claro, que también hay cosas muy positivas, como una correcta postura de conducción -elevada, como si fuéramos en un pequeño TT-, un equipamiento completo en cualquiera de las versiones -por básicas que sean- y una visibilidad muy correcta en todas direcciones -especialmente a través de los gigantes retrovisores-.

Aunque, de todo, lo que más nos ha gustado y sorprendido de este japonés es lo bien que va en carretera; sí, porque es en la carretera donde hemos realizado la totalidad de pruebas con un vehículo que, a pesar de su apariencia -y de que cuenta con una versión de tracción a las cuatro ruedas por 2.900 euros adicionales- no deja de ser un turismo ‘más alto’.

Arrancamos y, la primera sensación, apenas transcurridos los primeros kilómetros es similar a la que tienes cuando conduces un ‘señor coche’; la suspensión ‘se traga’ los primeros baches y badenes sin casi enterarnos dentro, el motor diesel no se escucha mucho, el cambio se ‘deja manejar’ con suavidad- pero vamos por partes.

Primero, la teoría. Este Qashqai es todo un ‘afortunado’: estrena plataforma, nada menos que la misma que llevará -aunque con profundas modificaciones- el próximo Renault Mégane. De ella podemos decir que es moderna, con lo último en suspensiones y, por lo que hemos percibido durante la prueba, muy robusta.

Sobre el asfalto, el Nissan es magnífico en lo que solemos denominar ‘calidad de rodadura’; va tan bien amortiguado que su comodidad es notable casi siempre, da igual que pisemos suelo liso o rugoso: la sensación es la de que la suspensión ‘va sobrada’ a la hora de hacer su trabajo.

Otra demostración, basta con pasar a cierta velocidad sobre uno de los  ‘guardias tumbados’ para comprobar cómo el Qashqai los sobrepasa sin dejar en ningún momento que el paragolpes delantero roce con el suelo. Brillante.

Además, lo bueno es que en zonas más rápidas, muestra una estabilidad impropia de un coche de semejante altura, por lo que se pueden abordar curvas cerradas con confianza. Y si surge cualquier ‘amago’ de inestabilidad, ahí está el ESP. En resumen, este Nissan nos ha gustado casi tanto como un VW Golf, respecto al que aporta una suspensión un poco menos seca.

También nos ha convencido el rendimiento de los frenos y el tacto del pedal, que es instantáneo, de forma que en cuanto lo pisas lo más mínimo notas que el Qashqai frena con fuerza; en distancias de frenado, este Nissan cumple muy bien; eso sí, en detenciones al límite, su mayor altura le desestabiliza un poco más que en otros compactos, aunque sin llegar a ser crítico.

En cuanto a la dirección, es correcta en general, aunque no es precisamente la más rápida -con 3,2 vueltas de volante de lado a lado- y en los primeros instantes de giro, su tacto resulta extraño, como si hubiera que vencer una ‘resistencia’. Curiosamente, luego es bastante precisa y transmite bastante confianza para tomar muy rápido cualquier curva, bien sea rápida o lenta.

A la hora de hablar de motor, más buenas noticias; en este aspecto, Nissan se beneficia de pertenecer a Renault. Por eso, el motor de este modelo -de procedencia Renault- es el 2.0 dCi de 150 CV ya conocido en los Mégane, Laguna, Scénic- Un propulsor muy avanzado -con 16 válvulas, common rail de última generación, cadena en lugar de correa de distribución para reducir sus costes de mantenimiento– y con muy buen rendimiento.

Bueno, en el sentido de que no sólo es rápido, sino que además es muy ‘fino’, pues suena o vibra lo justo. Su ‘modo de actuar’ no impresiona; tal es su progresividad desde las 1.900 hasta las 5.000 rpm que da la sensación de ser más lento o menos potente de lo que en realidad es. Sus prestaciones son buenas y se complementa a la perfección con el cambio manual de seis velocidades que incluye de serie -por cierto, también de manejo rápido, preciso y agradable-.

Eso sí, no es más rápido que un Golf, un Mégane o un Focus con la misma potencia; ¿la razón? Un sobrepeso, respecto a estos modelos, que ronda los 150 kg -algo que no le beneficia principalmente en la aceleración-, una aerodinámica más desfavorable -que le perjudica en las aceleraciones largas o en velocidad máxima- y unos neumáticos muy anchos, de 225 mm -lo normal son unos 205- que incrementan el rozamiento.

Todo lo anterior también tiene su repercusión en el consumo; ojo, repetimos: este Qashqai anda muy bien y su consumo es ajustado, pero casi cualquier otro rival ‘convencional’ le supera.

En resumen, el Qashqai nos ha convencido; el hecho de ser diferente no está reñido en este caso con que sea bueno. Lástima que, ahora, quien quiera un unidad deba soportar una enorme lista de espera..

Por motores..

Esta es la versión más potente, con 150 CV. Por debajo se emplazan otras tres mecánicas: otro diesel 1.5 dCi de 105 CV y dos gasolina: 1.6 de 115 y 2.0 de 140 CV. Todos incluyen, de serie, una caja de cambio manual de seis velocidades, excepto el gasolina de 115 CV, que la lleva de cinco. Además, los propulsores 2.0 disponen de dos opciones: por 1.000- más, un cambio automático de seis marchas, y por otros 2.900 euros, un dispositivo de tracción total.

Por precios…

El gasolina 1.6 es el más barato: desde 18.680 euros; su equivalente diesel es el 1.5 dCi, que sale por 2.000- más. Por encima, se coloca el 2.0 gasolina, que está disponible desde 20.480 euros, mientras que el diesel 2.0 correspondiente cuesta 3.000- más.

Por acabados y equipamientos…

Existen tres niveles; el más básico es el Visia -sólo con los motores 1.5 dCi, 1.6 y 2.0 dCI 4×4- que ya incluye ABS, ESP, aire acondicionado, radio CD con bluetooth, ordenador de a bordo, volante multifunción- El intermedio es el Acenta; se ofrece con los cuatro motores, y el más interesante: por apenas 800- más, a lo anterior añade climatizador bizona, faros antiniebla, control de velocidad, control de aparcamiento, sensor de lluvia y luz, faros antiniebla, llantas de aleación- El más lujoso se llama Tekna -2.000- más caro que el Acenta y para todos los motores, salvo el 1.6-: no sólo es el más equipado -cuenta con faros bixenón, techo panorámico, cargador de CD’s– sino que es el único que puede llevar opciones como el sistema de navegación con cámara de visión trasera -2.150– o tapicería de piel -1.000 euros-.

La gama Nissan Qashqai (2007) 2.0 DCI Acenta 4X2

El punto fuerte del Qashqai es su apariencia de calidad… aunque, tras esta primera impresión inicial, salen a la luz pequeñas lagunas que delatan que se encuentra por detrás de sus ‘primos’ de Renault. ¿Lo más destacable? El chasis es rígido, pero no lo suficiente en caso de que queramos hacer alguna ‘escapada’ al campo.

Fiabilidad…Aún es pronto para hablar de fiabilidad; de momento, la única referencia que poseemos tiene que ver con los motores diesel dCi -1.5 y 2.0-, presentes en otros modelos de Renault y, de momento, no están dando problemas. Asímismo, según el informe de fiabilidad del ADAC alemán, Nissan ocuparía el 22º puesto en un ránking de 33 marcas.-Por otra parte, según un estudio sobre satisfacción al cliente de la consultora JD-Power en Europa, la firma japonesa obtiene un discreto 19º puesto de un total de 28 marcas. Si, con todo lo anterior, quieres curarte en salud, Nissan ofrece ampliar la garantía hasta los cinco años -580–.

Seguridad…El-Qashqai consigue la máxima puntuación en EuroNCAP -organismo privado que analiza la seguridad pasiva* de los coches nuevos-: cinco estrellas o, dicho de otra forma, 36,83 puntos de un total de 37. En la prueba de impacto frontal, el Nissan ofrece una protección del 100%; en el impacto lateral logra otro 100%.

Descuentos…De momento, el Qashqai es un coche que ‘se vende solo’, por lo que es muy difícil encontrar algún tipo de rebaja. Lo único que hemos logrado haciéndonos pasar por clientes es un descuento que ronda los 500-. Preguntando acerca del plazo de espera, en todos los concesionarios nos comentaban que, eligiéramos la versión que eligiéramos, había que esperar unos siete meses.

Climatización…El climatizador bizona -de serie en el Acenta- funciona muy bien, no es ruidoso y se maneja con sencillez. Además, hasta su diseño es atractivo.

Comodidad…En general, la ergonomía es buena, aunque en este aspecto no es mejor que un Renault. Los asientos son correctos, pero tirando a blandos.

Alumbrado…Las luces de serie son bastante potentes, sobre todo en cortas. En el acabado Acenta los antiniebla y el sensor de luces vienen de serie; si queremos faros bixenón, hay que irse al Tekna.

Visibilidad…Excelentes retrovisores laterales; visibilidad mejorable en el ¾ trasero delantero. Buen limpiaparabrisas.

Mantenimiento/ Reparaciones…En cuanto a las reparaciones, hemos comparado el precio de varias piezas que habitualmente se sustituyen con las de uno de los compactos más vendidos del mercado: el Ford Focus. En los precios no se tiene en cuenta la mano de obra ni el tiempo de sustitución de cada pieza.

El Nissan es más barato en…

El Nissan es más caro en...

Delante

La postura de conducción es muy buena…; la ubicación de los pedales, así como de la palanca del cambio -ligeramente elevada- y la posición de los mandos es correcta. Lo que menos convence es el mullido de los asientos delanteros: es duro en los laterales y más blando en la base, donde nos sentamos; a ciertas personas, esto puede cansarles con el paso de los kilómetros. El volante cuenta de serie con amplios reglajes en altura y profundidad.

Detrás

Algo de anchura...El buen tamaño de las puertas -más por altura que por longitud- junto con una carrocería elevada permiten un acceso correcto. El espacio no está mal para dos adultos: la altura es más que buena y hay un buen sitio para las piernas y los pies. Lo peor es que la anchura es justa; tres nunca irán cómodos, y el que vaya en medio contará con una banqueta más dura, menos altura y sus rodillas chocarán con los respaldos de los asientos delanteros..

Maletero

Es muy bueno por capacidad, porque el portón es bastante amplio y no hay obstáculos que limiten el tamaño de la boca de carga. De serie, la banqueta trasera se abate en dos mitades, quedando una superficie bastante lisa, aunque no del todo plana. ¿Lo peor? La rueda de repuesto es de emergencia, el plano de carga queda algo elevado y la luneta trasera no es practicable.

No sólo lo parece: la calidad es muy buena

…y lo que menos convence…Las salidas de aire circulares son algo complejas de manejar -hay que ‘meter el dedo para girarlas-; un volante multifunción siempre se agradece- pero el del Qashqaitiene botones que quedan algo lejos de los dedos y su orden no es el más lógico. La instrumentación es demasiado ‘simplona’ de diseño mientras que el volante, aunque forrado en cuero de serie, tiene un tacto demasiado rugoso.

Lo que sí nos ha gustado… Lo mejor es el diseño en general; el salpicadero es moderno, sin grandes complicaciones en sus formas y con unos recubrimientos de plástico agradables al tacto; la sensación ‘aparente’ de calidad es buena. Además, los mandos principales -incluida la radio- están bien situados.

¿Y en seguridad?…Cumple muy bien; de serie, todos los Qashqai vienen equipados con ABS, control de estabilidad y seis airbags -frontales, laterales delanteros y de cortina-. Además, consigue la máxima calificación en EuroNCAP .

El equipamiento de serie es muy completo…; de hecho, apenas hay lugar para las opciones. Eso sí, consulta en www.Nissan.es el amplio listado de accesorios que tienen en el concesionario.

Incluye un equipo de música con cuatro altavoces…; su calidad de sonido es francamente buena, y la eficacia de recepción de su antena sorprendente -es de los pocos coches en los que se sigue escuchando la radio cuando se cruza alguno de los túneles de la M30 madrileña-. Puede almacenar un total de 30 emisoras, es bastante sencilla de manejar -a pesar de que tiene bastantes botones- su calidad de sonido es más que buena -tan sólo los altavoces traseros parecen algo ‘pobres’ y, además de lector de CD, incluye conexión bluetooth, que nos permitirá usar un manos libres compatible. Sólo el acabado ‘tope’ Acenta da derecho a un cargador de seis CD’s.

Lo que otros no te cuentan

¿Qué lleva de serie?…El acabado Acenta dispone de: ABS, ESP, cuatro elevalunas eléctricos, cierre centralizado con mando a distancia, dirección asistida, equipo de audio con CD y bluetooth, control de velocidad, volante multinfunción, ordenador de a bordo, espejos eléctricos, llantas de 16″, climatizador bizona… La única opción es la pintura metalizada -sale por 350 euros-. Este Nissan se ofrece con 11 colores en total.

¡Ahí está!…El antiniebla trasero cumple muy bien su función… pero es, sin duda, el elemento más expuesto de todo el coche.

Depósito…Para abrir la tapa del depósito de combustible hay que buscar muy por debajo de la zona del volante…

¿Qué más?…Sólo el Botón del elevalunas del conductor va iluminado;-el de los retrovisores, no.No hay salidas de aire para las plazas traseras- pero sí un botón que permite enviar aire desde las salidas del salpicadero.
Todos los pasajeros cuentan con indicador visual que avisa si no llevan el cinturón de seguridad puesto.La tapa de la guantera es enorme; el hueco que existe detrás… no es para tanto.Los plafones de luces son los mismos que veremos en muchos modelos de Renault.

Datos oficiales Nissan Qashqai (2007) 2.0 DCI Acenta 4X2

Nuestras mediciones

Prueba de potencia

Condiciones de la pruebay del Vehículo:Sólo el Botón del elevalunas del conductor va iluminado;-el de los retrovisores, no.
Km al inicio: 819 km Temperatura ambiente: 32º C Presión atmosférica: 1.031 mbar Peso en báscula: 1.590 kg aprox. Reparto del./tras.: 61/39% Neumáticos: Bridgestone Dueler HP (215/65 R16) Presión del./tras.: 2,3/2,1 bar.

Medidas

Bueno…El interior no está mal por espacio, aunque bien es cierto que en el mercado hay todo camino y monovolúmenes con su mismo tamaño exterior que luego son más aprovechables y prácticos por dentro. En cualquier caso, está a la altura de un buen compacto, aportando un poquito más de espacio para equipajes.

Aceleración

Lastrado… Las cifras son buenas, más que suficientes, pero su mayor peso y peor aerodinámica terminan condicionándole en las aceleraciones cortas y largas;-de esta forma, resulta en torno a un segundo más lento que un VW Golf TDI 140 CV.

Adelantamiento

Con mucha fuerza… Este ejercicio es idóneo para que el Qashqai muestre todo su potencial; de hecho, los registros son tan buenos que en este apartado apenas pierde terreno frente a compactos más ligeros. Los valores en cuarta y quinta velocidad son de sobresaliente, mientras que la sexta, en el paso de 80 a 120 km/h emplea 11,7 seg.

Consumo

Contenido… El Qashqai nunca consume demasiado;-tan sólo en ciudad sube un poco la media, debido a que tiene que ‘tirar’ de un peso considerable. Sí que llama la atención la buena capacidad de su depósito, unos 10 litros superior a casi todos sus rivales

Sonoridad

Aceptable… Es cierto que cuando arrancamos con el motor en frio, o cuando circulamos con el motor a pocas vueltas, denota que es un diesel… Sin embargo, la cosa mejora en cuanto subimos de velocidad. A pesar del buen tamaño de los retrovisores, o de los neumáticos, no hay ruidos molestos de aerodinámica o rodadura.

Frenada

Casi notable… Las distancias que hemos obtenido son correctas, aunque suponemos que cuando tanto los frenos como las pastillas estén más rodados esos valores mejorarán*. En cuanto a la resistencia, nos ha sorprendido positivamente; tan sólo el tacto del pedal -que se volvía más esponjoso- acusaba la fatiga después de un duro esfuerzo.

¿Es rival de un commpacto? (VW 2.0 TDI Golf)

Para saber si un nuevo modelo de tamaño compacto es un coche a tener en cuenta hay que enfrentarlo contra -quién si no- el VW Golf. Un modelo con más de 30 años y cinco generaciones a sus espaldas que presume de ofrecer un magnífico equilibrio. Hemos escogido la variante equiparable por precio, potencia y equipamiento: el Golf 2.0 TDI-Highline 5p.

1.-Por fuera

El Nissan se impone por su imagen más novedosa… y porque, al fin y al cabo, es ‘más coche’: mide 4,31 m de largo por 1,78 m de ancho y 1,60 m de alto frente a los 4,2, 1,76 y 1,48 m, respectivamente, de su rival alemán. Eso sí, el Golf tiene la ventaja de ofrecerse también con carrocería de tres puertas, familiar -Variant- e incluso monovolumen -Golf Plus-.

2.-Por dentro

Los dos son buenos ejemplos de un coche moderno: están bien hechos y rematados -aunque aquí se nota que el Golf es un ‘especialista’-, tienen un diseño muy atractivo… Eso sí, el VW gana a la hora de hablar de postura de conducción -gracias sobre todo a sus mejores asientos-, mientras que el Nissan se impone en visibilidad, insonorización, además de por contar con un maletero un poco más grande -410 por 350 l- y una accesibilidad al interior algo mejor.-Por todo, es el que vence.

3.-Por motor

El Golf 2.0 TDI cuenta con un motor turbodiesel de 140 CV.-Por funcionamiento es menos agradable que el del Nissan -suena más y su empuje es más brusco- pero hay que reconocerle unas magníficas prestaciones: alcanza los 203 km/h -191 el Nissan-, acelera de 0 a 100 en 9,3 seg. -10,5 su rival- y consume de media sólo 5,4 litros -6,6 l el Qashqai-. Con justicia, gana el coche alemán.

4.-En carretera

De nuevo, quizá lo más justo hubiera sido el empate; son dos modelos muy seguros, que se dejan llevar muy rápido sin dificultad y cómodos -aunque en este aspecto queda por delante el Nissan-. Si le damos la victoria al Golf es por el magnífico tacto de su dirección, del su cambio -manual y con seis marchas*, como en su rival- y por sus magnífico equipo de frenos.

5.-Precio/equipamiento

Aquí es donde están las diferencias más notables; para empezar, el Nissan sale por 1.510- menos;-además, para que estuvieran en igualdad de equipamiento, al Golf habría que sumarle un año más de garantía, climatizador bizona -300–, control de aparcamiento -465e- y faros antiniebla -165e-. Eso sí, curiosamente, los dos ofrecen la opción de la tracción total, pero mientras que la del Qashqai cuesta 2.900-, la del Golf son sólo 1.730-. Con todo, gana el japonés.

Veredicto

En general, nos convence más el Nissan; algo que es todo un halago cuando el Golf ya es de por sí un coche formidable, más recomendable incluso por amplitud de gama o prestaciones puras. Por lo demás, el Qashqai es muy interesante.

¿O es rival de un todo camino? (Toyota RAV-4 2.2 D-4D 136 Luna.)

Por 2.900- más -es decir, que la versión 2.0 dCi.- Acenta de nuestro súper test se quedaría en 26.380–, un Qashqai puede incluir tracción total. No es que se convierta en un todo camino, pero sí en una alternativa al exitoso Toyota RAV-4 2.2 D-4D 136 Luna.

1.-Por fuera

En realidad representan dos conceptos distintos… el Nissan es un compacto con estampa de todo camino, mientras que el Toyota sí lo es: con su 1,72 m de altura le saca 11 cm al Nissan. El RAV-4, con 4,39 m de largo, continúa siendo bastante maniobrable. Lo peor es que el portón se abre de lado, lo que le resta practicidad frente al Nissan a la hora de aparcar en sitios pequeños.

2.-Por dentro

Ventaja clara para el Toyota;-es más amplio tanto para los pasajeros como para el equipaje -con 490 l de maletero-. También es más práctico, gracias a su banqueta trasera deslizante. Asímismo, el diseño del salpicadero nos parece muy original y la calidad está un paso por delante de la que ofrece el Nissan. Además, a pesar de ser un auténtico todo camino, la postura de conducción es magnífica.

3.-Por motor

La victoria se la lleva el Nissan, aunque por poco. Su motor es más silencioso y en esta versión 4×4 se impone al Toyota en velocidad máxima -190 frente a 180 km/h-. Sin embargo, es más lento en el 0 a 100 -10,9 frente a 10,5 seg. del Toyota- y consume un poquito más -6,9 frente a 6,6 litros-. Con todo, el del Qashqai nos parece un propulsor más equilibrado.

4.-En carretera

Si sólo considerásemos este aspecto, el Nissan ganaría con cierta facilidad: es claramente más ágil -le saca unos 200 kg de ventaja-, frena mejor y su cambio es más preciso. Eso sí, el RAV-4 se defiende muy bien, es igual de cómodo… y pone tierra de por medio cuando se trata de abandonar el asfalto; sobre pistas de mayor o menor dificultad nos gusta más su mayor robustez y mejor sistema de tracción.

5.-Precio/equipamiento

El Toyota tiene poco que hacer: pertenece al segmento de los todo camino, modelos que no son precisamente asequibles. De esta forma, su precio final con el acabado básico Luna es de 28.950-, es decir, 2.570- más que el Nissan. Eso sin contar que le faltan elementos que sí incluye el Qashqai: climatizador bizona, faros antiniebla, volante multifunción, control de velocidad, sensores de luz y lluvia… La única forma de tenerlos es elegir el acabado Sol, pero el problema es que resulta aún más caro: 31.450-, es decir, 4.620- más caro que el Nissan. Ojo, a cambio te llevas un 4×4 más grande y con mayor ‘imagen’.

Veredicto:

A poco que vayas a abandonar el asfalto, no hay duda, elige el Toyota, uno de los mejores modelos de su segmento. Para todo lo demás, el Qashqai se adecúa más a lo que demanda el público, con la ventaja de tener una mejor relación precio/equipamiento.

Otros rivales del Qashqai

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