7 formas de recurrir la multa de un radar de velocidad con éxito

Si te ha ‘pillado’ un radar de velocidad superando el límite máximo establecido en la carretera por la que circulabas y te estás planteando recurrir esa sanción, te explicamos hasta 7 motivos por los que tu recurso puede tener éxito y conseguir que te quiten la multa.

Entre las infracciones más comunes y que generan el mayor número de sanciones está el exceso de velocidad, y el radar de velocidad es el aparato clave para recurrirlas. Este tipo de multas conllevan sanciones que van desde los 100 euros hasta los 600 euros, y la retirada de dos a seis puntos del carnet; además es un delito conducir con un exceso de velocidad superior a la establecida en 60 km/h en vías urbanas y en 80 km/h en las interurbanas. En la tabla de aquí debajo puedes todas las cuantías y retiradas de puntos relacionadas con esta infracción.

Eso sí, según la Dirección General de Tráfico (DGT), el exceso de velocidad es un factor de riesgo que está presente en casi el 20 % de los accidentes con víctimas. Además, este organismo asegura que dos de cada tres sanciones en vías interurbanas están directamente relacionadas con la velocidad excesiva.

Cómo pueden quitarte una multa de un radar de velocidad

Existen varios trucos con los que puedes conseguir que te quiten la multa de un radar de velocidad recurriendo la sanción. No obstante, recuerda que si recurres la sanción pierdes el derecho a beneficiarte del 50 % de descuento en el importe de la multa por pronto pago, de forma que es importante que te asegures de que tus alegaciones te permitirán conseguir que te anulen la multa.

1.- El radar de velocidad no ha aplicado el margen de error

Los radares de velocidad cada vez son más precisos y tienen un menor margen de error: si en los cinemómetros más antiguos se aplicaba hasta un 7 % de margen de error entre la velocidad que detecta el aparato y aquella a la que circulamos, ahora, los más modernos cuentan con márgenes de error de un 3 %.

Según la Orden ICT/155/2020, de 7 de febrero, por la que se regula el control metrológico del Estado de determinados instrumentos de medida, el margen de error de los radares queda establecido de la siguiente forma:

• Radares de tramo: el margen de error es de -3 km/h hasta 100 km/h y de un -3 % a partir de 100 km/h.
• Radares fijos y radares móviles de trípode o instalados en vehículos parados: el margen de error es de -5 km/h hasta 100 km/h y de un -5 % a partir de 100 km/h.
• Radares aéreos (helicóptero Pegasus): el margen de error es de -5 km/h hasta 100 km/h y de un -5 % a partir de 100 km/h.
• Radares en instalación móvil sobre vehículo: el margen de error es de -7 km/h hasta 100 km/h y de un -7 % a partir de 100 km/h.

2.- El radar se contradice con una señal

Es lo que sucedió, en 2019, cuando un conductor se dio cuenta de que un radar fijo de Oviedo, situado a la salida del túnel de la Bolgachina, estaba mal colocado; 52 metros antes de lo que tenía que estar según los informes oficiales. En este caso, el radar multaba a todos los vehículos que superaban los 90 km/h de velocidad cuando, en ese tramo, ya estaba permitido circular a 120 km/h (el radar se encontraba justo después de la señal que indicaba el fin de la limitación de la velocidad máxima a 90 km/h). La DGT reconoció el error y tuvo que anular casi 16.000 multas que había interpuesto.

3.- El radar no ha tomado dos fotografías

Esto ya ha sucedido en dos ocasiones: en 2021, con un radar fijo situado en el kilómetro 13,66 de la A-66 en dirección Gijón-Avilés y, en marzo del año 2021 también, con un radar fijo situado en la provincia de Córdoba. En ambos casos el Juzgado anuló las multas por exceso de velocidad captadas por los radares fijos por no existir dos fotografías tomadas en diferentes instantes como establece la normativa para el tipo de radares multanova 6F-MR.

4.- Defecto de forma

Es posible que existan errores en la redacción de la multa y que podrían anularla, como datos personales o del vehículo. Por ejemplo, si el boletín de denuncia no especifica la matrícula ni el tipo de vehículo; o el motivo de la infracción que se explica no coincide con los hechos.

Del mismo modo, para que la multa por exceso de velocidad sea válida la imagen debe ser nítida para poder identificar perfectamente al vehículo, y la matrícula que se indica en la denuncia debe de coincidir con la del vehículo que aparece en la fotografía. Si salen dos vehículos en la imagen no es motivo para que la multa se anule, ya que para que esto ocurra tiene que existir la duda sobre cuál de los dos hizo que el radar saltara.

Aunque es importarte que sepas que, si la errata puede ser corregida o se identifica con claridad, la Administración puede corregirla y reenviarte la denuncia con el dato correcto después de que realices las alegaciones.

5.- Caducidad de la multa

Una multa deberá ser comunicada en un plazo de tres meses para las sanciones leves, de seis meses para las graves y de hasta un año para las muy graves; una vez pase este plazo, prescribirán. Aunque la sanción económica no prescribirá hasta pasados cuatro años y, en ellos, no se haya intentado cobrar.

6.- Identificación del conductor

La justicia ha anulado multas por exceso de velocidad en las que no se identifica al conductor por vulnerar la presunción de inocencia y no existir «prueba de que el recurrente fuera el conductor del vehículo». Esto último ocurrió cuando el Juzgado de lo Contencioso Administrativo número 6 de Madrid anuló la multa interpuesta, en 2018, debido una infracción que fue captada por un radar del helicóptero de la DGT Pegasus, que ‘cazó’ a un automóvil circulando por una autovía a 160 km/h cuando el límite era de 120 km/h.

7.- El aparato está en mal estado

Es obligatorio que la Administración revise de forma periódica los cinemómetros y las cabinas donde se encuentran, soportes, etc. Si esto no se hace y la documentación del radar no está en regla podían quedar anulada la sanción. Para ello, en el recurso tendrás que solicitar pruebas como el certificado de homologación del radar o el informe de su última revisión.