Con el SQ5 3.0 TFSI V6, Audi tiene en el punto de mira a los mercados norteamericano, suramericano y asiático, dejando el SQ5 TDI como tope de la gama Q5 en Europa.
El SQ5 3.0 TFSI V6 espera convencer a los clientes potenciales de estos países con un motor de 2.995 centímetros cúbicos de cilindrada, un V6 cuya bancada tiene un ángulo de 90º. Sus 354 CV de potencia -entre 6.000 y 6.500 rpm- y 470 Nm de par -a entre 4.000 y 4.500 rpm- le permiten acelerar de 0 a 100 km/h en 5,3 segundos, alcanzando una velocidad punta de 250 km/h, autolimitada electrónicamente. Y todo ello con un consumo de 8,5 litros a los 100 km y unas emisiones de 199 gramos de CO2 por kilómetro recorrido.
Este propulsor está acompañado por la tracción total Quattro y el cambio automático de ocho velocidades Tiptronic con dos modos de conducción -más la posibilidad de usarlo en modo manual gracias a las levas en el volante-.
Los elementos que caracterizan al SQ5 TDI permanecen en esta versión de gasolina: La altura del chasis ha sido reducida en 30 mm y respecto al Q5 estándar -con suspensiones más firmes-, y las llantas de aleación de serie son de 20 pulgadas -opcionalmente se podrán escoger unas de 21″-, instaladas en unos neumáticos de medida 255/45. Junto a los paragolpes rediseñados y el pequeño spoiler trasero, este SQ5 añade los distintivos «V6 T» en los pasos de rueda delanteros.
Otra de las opciones del SQ5 TDI es el sistema Audi Drive Select, a través del cual se pueden controlar los modos de los distintos dispositivos que equipa el vehículo. Si se solicitan el sistema de infoentretenimiento MMI Navigation Plus y la conexión Bluetooth, se dispondrá de Internet en el interior del vehículo.