Sin restar mérito a los espectaculares P1 y Senna, el McLaren F1 sigue siendo el modelo más salvaje y completo de la marca británica, un verdadero icono del mundo del automóvil que todavía hoy sigue impresionando por sus características singulares y por su excepcional rendimiento.
McLaren es consciente de ello y se ha propuesto romper todos los moldes con el sustituto de su legendario hypercar, el denominado BP23. Poco a poco vamos conociendo más detalles sobre este modelo, entre ellos que su nombre definitivo no tendrá nada que ver con el código interno por el que se conoce en la actualidad. También sabemos que, al igual que el F1, tendrá un cockpit de tres plazas con el puesto de conducción situado en el centro.
Todavía más rápido
Aprovechando el Salón de Ginebra, el CEO de McLaren Mike Flewitt ha desvelado otra característica del próximo buque insignia de la marca y se trata de una declaración de intenciones en toda regla. Gracias al sistema de propulsión híbrido y a una aerodinámica cuidadosamente estudiada, el BP23 superará la velocidad máxima del F1, es decir, los 386 km/h. Tanto es así que podría alcanzar -e incluso superar- los 391 km/h.
Si todo va bien, la nueva creación de McLaren debería presentarse en sociedad a finales de 2018, aunque no estará disponible hasta el año siguiente. El único inconveniente, además de un precio de 1,6 millones de libras antes de impuestos, es que cada una de las 106 unidades que se producirán ya tienen dueño. Hasta su puesta de largo, deberemos conformarnos con el McLaren Senna GTR, un bólido de circuito que tampoco se queda atrás en términos de prestaciones.
