Los fotógrafos del CarPix han obtenido unas excelentes fotos del futuro eléctrico de Mercedes casi sin camuflaje. El Mercedes-Benz EQA será el modelo de acceso a la gama, por debajo del EQB, y tendrá como principal rival al Volkswagen ID.3. Y tal y como su nombre y su imagen dan a entender, estará basado en el SUV GLA; en el caso del GLB, lo harán el monovolumen compacto de la marca germana, el Clase B.
Mercedes ya tiene a la venta dos vehículos 100 % eléctricos. El primero de la serie EQ fue el EQC, basado en el Mercedes GLC, que mide 4,76 metros de longitud, se propulsa a través de dos motores (la potencia total es de 408 CV) y tiene una autonomía máxima homologada de 416 kilómetros. Su precio parte desde los 77.425 euros.
Por otra parte, a mediados de este año se dieron a conocer los precios del Mercedes EQV, un monovolumen de gran tamaño basado en el Clase V y que está disponible con carrocería larga (5,14 metros) y extralarga (5,37 metros). Dispone de un motor eléctrico que desarrolla 204 CV y tiene una autonomía homologada de 357 kilómetros, según el ciclo de ensayo WLTP.
Mercedes-Benz eléctricos: así es la gama EQ de cero emisiones/strong>
Volviendo de nuevo al EQA, cabe destacar que mantendrá unas dimensiones similares a las del GLA, aunque con notables diferencias estéticas. Por ejemplo, el frontal cambiará con unos grupos ópticos de nueva factura y una parrilla cerrada. El parachoques también será diferente, con un diseño más atractivo y con un aerodinámica más eficiente. Detrás, un travesaño óptico entre los faros será el mayor cambio, mientras que la posición de la matrícula se ha movido hacia abajo, donde está el paragolpes, una seña de identidad que servirá para diferenciarlo de un vistazo del GLA.
El habitáculo también presentará novedades, con una instrumentación específica y con mandos adaptados a su sistema de propulsión eléctrico. No obstante, mantendrá muchos elementos del GLA, incluidas las levas en el volante para aumentar y reducir la capacidad de retención (al ser eléctrico, no lleva caja de cambios).
En lo que respecta a la autonomía, si tenemos en consideración la que ofrece el EQB, hasta 500 kilómetros, es de esperar que el EQA arroje unas cifras similares, y es que ambos modelos se basan en la misma plataforma (MFA II), por lo que la tecnología empleada será la misma. El resto de datos técnicos son aún una incógnita, aunque viendo las similitudes a nivel de arquitectura, todo indica que el EQA será muy parecido a su hermano mayor.
