Nos hemos desplazado hasta Innsbruck, en Austria, para probar por las carreteras de los Alpes el BMW Serie 2 Active Tourer; un modelo con el que BMW competirá, por primera vez, en el segmento de los monovolúmenes compactos y con el que la marca alemana rompe la mayoría de sus tradiciones. No en vano, se trata del primer BMW de tracción delantera, el primero en equipar mecánicas de tres cilindros y el primero diseñado bajo las premisas de ser amplio, práctico y ser capaz de transportar a una familia con comodidad. ¿Cuál será el resultado?
Por fuera: Un BMW regordete
Al menos, los BMW Serie 2 Active Tourer 225i y 218d que nos esperan en el aeropuerto de Innsbruck, se identifican claramente como un BMW gracias a rasgos como los riñones del frontal -BMW denomina así a la doble toma de aire frontal de sus modelos-, sus faros traseros en forma de L, o un CX de 0,26 que es el récord entre los monovolúmenes€ Por otro lado, sus dimensiones son bastante compactas: mide 4,34 metros de largo -2 cm más que un BMW Serie 1-, 1,55 metros de alto y 1,80 m de ancho.
Abro la puerta del BMW Serie 2 Active Tourer y me acomodo en el asiento del conductor. El interior es bastante luminoso gracias al techo panorámico y el salpicadero mantiene la ´esencia´ típica de BMW: una pantalla de 8,8″ preside una consola central ligeramente orientada hacia el conductor y entre los asientos hay un mando giratorio con una superficie táctil que permite controlar las funciones de audio, navegación o teléfono con sólo deslizar el dedo sobre él. Por calidad, es tan bueno como un BMW Serie 3 y mejor que todos sus rivales: abunda el plástico blando, todo está bien ajustado y resulta agradable al tacto.
Lo siguiente que llama mi atención es la postura de conducción: es tan elevada que parece que conduces un BMW X3. De hecho, el conductor va sentado 110 mm más alto que en un BMW Serie 1 y 29 mm más que en un BMW X1. Al menos, los amplios reglajes del asiento y el volante hacen que el puesto de conducción sea muy cómodo.
En lo que a las plazas traseras respecta, el BMW Serie 2 Active Tourer equipa una banqueta corrida que se puede deslizar 13 centímetros y cuenta con respaldos reclinables. Puede decirse, que es el primer BMW en el que el pasajero central viajará cómodo, debido a que el túnel central es más pequeño que en el resto de BMW€ pero tres ocupantes no irán holgados detrás. De hecho, rivales como el Citroën C4 Picasso o el Renault Scénic cuentan con tres asientos individuales y superan con claridad al BMW Serie 2 Active Tourer por espacio para las piernas o anchura. Por el contrario, este BMW es un modelo especialmente bueno por altura.
En cuanto al maletero, cuenta con 468 litros de capacidad, que ascienden a 1.510 litros si se abaten los asientos traseros -puede hacerse en una proporción 40:20:40- y su portón se puede abrir con sólo deslizar el pie por debajo. No es enorme, pero está en la media de la categoría.
En marcha: ¿Un BMW de verdad?
De inicio, el BMW Serie 2 Active Tourer se venderá con tres mecánicas turbo: dos gasolina, un 1.5 turbo de tres cilindros con 136 CV -218i- y un 2.0 turbo de 231 CV -225i-; y un diesel 2.0 diesel de 150 CV -218d-. Durante nuestra primera toma de contacto hemos podido probar el gasolina más potente y el diesel de 150 CV que se convertirá en el modelo más vendido de la marca.
BMW Serie 2 Active Tourer 218d: Equipa un motor 2.0 turbo con 150 CV y 330 Nm de par con un funcionamiento agradable. Se trata de la mecánica más lógica de la gama por su equilibrio entre consumo y prestaciones: acelera de 0 a 100 km/h en 8,9 segundos y alcanza 210 km/h con un consumo medio de 4,1 l/100 km. En marcha, se trata de un motor agradable por su respuesta contundente y progresiva entre 1.500 y 4.000 rpm. Su sonoridad y vibraciones mejoran respecto a otros diesel de la marca; pero no llega al nivel de, por ejemplo, un motor 2.0 TDI de 150 CV. De serie, el BMW Serie 2 Active Tourer 218d se venderá asociado a un cambio manual de seis velocidades de manejo rápido y preciso y, de forma opcional, podrá equipar una caja automática de ocho velocidades.
BMW Serie 2 Active Tourer 225i: Los 231 CV de esta mecánica y el rápido funcionamiento de su caja automática Steptronic de ocho marchas, le convierten en uno de los monovolúmenes compactos más rápidos: acelera de 0 a 100 km/h en 6,6 segundos y alcanza una velocidad máxima de 241 km/h, con un consumo de 6,0 litros/100 km.
En marcha, no resulta tan ágil y rápido de reacciones como un BMW Serie 1€ pero, por comportamiento, el BMW Serie 2 Active Tourer es el mejor monovolumen con mucha diferencia. Su suspensión está muy bien puesta a punto: su carrocería apenas balancea y su trasera siempre va ´anclada´ al suelo en cambios de apoyo o en frenadas bruscas en mitad de una curva. Por otro lado, mantiene un confort de marcha muy razonable… aunque sin llegar al nivel de los Citroën C4 Picasso o Renault Scénic. Tal vez, la dirección sea su punto débil: tiene un tacto algo artificial y no transmite demasiada información acerca de lo que hay bajo las ruedas. Por último, BMW ofrece dos configuraciones de chasis para el BMW Serie 2 Active Tourer: una normal y una Sport que incluye una amortiguación más firme y una carrocería con una altura rebajada en 10 mm.
Lo que llegará en otoño
El Serie 2 Active Tourer se pondrá a la venta en septiembre con dos acabados: Sport Line -orientado a los conductores más jóvenes- y Luxury Line -lujoso-. Unos meses más adelante, la gama crecerá con la incorporación de una versión de gasolina 220i de 184 CV y dos diesel; el 216d de 115 CV y el 220d de 184 CV -los dos más potentes podrán equipar tracción total en opción-. Por último, a finales de año llegará el acabado deportivo M Sport.
A continuación, te mostramos los precios de la gama:
BMW 218i: 28.500 euros
BMW 225i: 38.600 euros
BMW 218d: 30.300 euros