La verdad es que hay trabajos que merecen triunfar. Y el de NanoFlowcell es de estos. No se si su tecnología, que parece muy prometedora, será la que al final triunfe y se generalice. Ni siquiera si cuando llegue a su fase de comercialización, el Quant F será o no un éxito. Pero no me negareis que aunque fuese con motor de gasolina «vulgar», sólo por sus líneas este coche merece un aplauso.
Pero además esconde algo más bajo la carrocería de fibra de carbono. No es un coche de gasolina ni un híbrido. Tampoco es, en puridad, un eléctrico, puesto que funciona con dos líquidos en sus depósitos y no se recarga. Pero tampoco es un coche de pila de combustible «tradicional»: no se recarga con hidrógeno. De hecho, no es fácil ahora mismo, si no eres de NanoFlowcell, la empresa que lo ha fabricado, saber qué narices hay que echarle a esos dos depósitos. parece un secreto de estado.
Es su segundo coche. Hace un año el Quant E, entre los coches más raros del Salón de Ginebra, ya sorprendió con cifras espectaculares y una carrocería muy similar. Este nuevo F mejora las capacidades de aquél, cambia el color por un más llamativo y deportivo rojo y se acerca a la serie: será presentado en el salón de Ginebra. Y este ya está pensado para su homologación para ser comercializado de forma normal.
El «truco» de sus capacidades está en la tecnología que esconde. Genera electricidad a través de una especie de pila de combustible propia, en la que no se emplea hidrógeno. Usa dos líquidos iónicos, uno con carga positiva y otro negativa. Van en sendos depósitos de 250 litros cada uno. No es problemático: no son tóxicos ni inflamables, por lo que se ha podido aprovechar cualquier hueco para llevarlos. Estos dos líquidos generan energía mediante la transferencia de electrolitos a través de una membrana.
Esta energía alimentan los cuatro motores eléctricos, uno en cada rueda, capaces de generar puntas de 1.090 Cv con los que el coche pasa de los 300Km/h. En condiciones normales emplea sólo los traseros, dejando los delanteros para momentos en que se necesite más tracción. Lleva un alerón dinámico que se eleva por encima de los 80Km/h para mejorar la pisada de las ruedas traseras en marcha. Y no te dejes engañar por las fotos: no es un deportivo «canijo»: es un deportivo, de 5,25m, con puertas el alas de gaviota, pero con el espacio interior de un sedán grande.
