Hyundai i30 1.0 T-GDi
Así es. El Hyundai i30 es un compacto de cinco puertas y 4,34 m de largo que comparte plataforma, mecánica y sistemas de infoentretenimiento o seguridad con el nuevo Kia Ceed. Se ofrece con cuatro niveles de acabado: Klass, Link, Go y Tecno. A la venta desde verano de 2016.
Qué tiene de bueno. Es un modelo bastante cómodo y ofrece un interior amplio en todas las cotas. Con 395 litros, ofrece un maletero tan bueno como el del Kia. Por calidad no tiene nada que envidiar a sus rivales, tiene una buena postura de conducción y no cuesta habituarse a sus mandos. Por precio, es una de las variantes más asequibles, y también cuenta con un buen equipamiento de serie. Su comportamiento destaca por aplomo y sencillez de conducción.
Qué tiene de malo. Junto con el Ceed, es el peor por prestaciones puras -emplea también 11,1 segundos para pasar de 0 a 100 km/h- y, por debajo de 2.000 rpm, se le nota un poco perezoso. Tampoco está entre los que menos consume, sobre todo si no se es cuidadoso con el acelerador.
Veredicto. El i30 es un compacto que destaca por su buena relación precio-producto, comodidad y espacio interior. Comparte mecánica con el Kia.
Opel Astra 1.4 Turbo 125
Así es. El Opel Astra tiene una longitud de 4,37 metros. Con ese motor 1.4 Turbo de 125 CV, este compacto se vende con dos acabados: Selective y Dynamic. Está a la venta desde enero de 2016.
Qué tiene de bueno. El chasis ofrece un tacto de conducción muy bueno, gracias a un comportamiento ágil y preciso en carreteras de curvas y a la vez aplomado y noble en vías rápidas. Por acabados está un poco por encima de la media, y el puesto de conducción está bien resuelto desde el punto de vista de la ergonomía. Tiene un precio interesante, sólo mejorado por el Hyundai y el Kia.
Qué tiene de malo. Sus plazas traseras son de las más estrechas del segmento, si bien en las demás medidas está entre los mejores. Tiene un maletero de 370 litros que, sin ser pequeño, sí es el de menor capacidad de los presentes.
Veredicto. El Astra destaca por su buen resultado dinámico, además de un interior moderno y bien resuelto. Su precio es bueno y, también, tiene un buen equipamiento de serie.
Peugeot 308 1.2 PureTech 130
Así es. El Peugeot 308 es un compacto de cinco puertas y 4,25 m que data de 2014, si bien recibió un ligero restyling en primavera de 2017.
Qué tiene de bueno. El motor es exclente por su buena respuesta y porque su consumo real es bajo -es fácil mantenerse entre 6,0 y 6,5 L/100 km-. Gran parte de ello se lo debe a su contenido peso, pues es el compacto más ligero de este lote -esta versión se queda en 1.164 kilos-. Tiene una buena calidad de acabados, cuenta con un diseño muy personal y su maletero es el más grande de todos. Su comportamiento es el más vivo, algo que puede gustar a quien busque un tacto de conducción más deportivo.
Qué tiene de malo. El puesto de conducción no termina de convencer a todo el mundo, pues hay que llevar el volante muy bajo para poder ver la instrumentación. Por suspensión, es un poco más seco e incómodo que la mayoría de sus rivales.
Veredicto. Buena alternativa por consumo, maletero, calidad y hasta cierto tacto deportivo, pero no tanto si buscamos el coche más cómodo.
Renault Mégane TCe 130
Así es. El Renault Mégane es un compacto de cinco puertas y 4,35 metros de largo que, equipado con este motor 1.2 Turbo gasolina de cuatro cilindros y 130 CV, se ofrece con cuatro niveles de acabado: Limited, Zen GT Line y Bose. Tiene un cambio manual de seis marchas, pero puede llevar uno automático EDC de doble embrague con el mismo número de relaciones -y que destaca más por comodidad que por rapidez- por 265 euros más. Llegó en diciembre de 2015.
Qué tiene de bueno. Tiene un aspecto moderno, algo que también se nota en el interior, y en marcha resulta muy cómodo, con un comportamiento noble y fácil de conducir. Por calidad tampoco desentona e incluye un buen equipamiento de serie.
Qué tiene de malo. Sus plazas traseras son las más justas por espacio para las piernas, y por anchura también se ve superado por sus rivales. El motor es suficiente por prestaciones, pero podría tener un poco más de temperamento a bajo régimen y no es de los que menos gastan. Hay que acostumbrarse al manejo de su pantalla central táctil para manejarla con destreza en marcha.
Veredicto. El Mégane convence por modernidad y comodidad, con un maletero que le sitúa en la media. No es el mejor por espacio detrás ni tampoco por motor.
Seat León 1.4 TSI 125
Así es. El Seat León es un compacto de cinco puertas y 4,28 m que nació en 2013 y que recibió un leve restyling en 2017. Hay seis acabados: Style, Style Visio, FR, FR Plus, Xcellence y Xcellence Plus. Lo hay con tres puertas por el mismo precio.
Qué tiene de bueno. Su puesto de conducción está muy bien resuelto desde el punto de vista ergonómico: es muy fácil dar con la postura ideal y el manejo de todos los mandos es muy sencillo. Por calidad está a la altura de sus rivales. Su comportamiento es muy bueno -tan noble como el Kia, pero más ágil-y, al mismo tiempo, es un modelo bastante cómodo -aunque no tanto como el Kia-. Por motor, es de los mejores: gasta casi tan poco como el Peugeot, pero es más rápido -tarda 9,1 segundos en pasar de 0 a 100 km/h-.
Qué tiene de malo. Aunque su maletero está en la media, es algo más pequeño que el del Kia o el Peugeot. Sus plazas traseras también son de las más estrechas.
Veredicto. Por motor y chasis es uno de los mejores compactos, y además tiene una buena relación precio-equipamiento. Hay mejores opciones por amplitud.
Volkswagen Golf 1.4 TSI 125
Así es. El Volkswagen Golf es, junto con el León, el único que se vende también con tres puertas -650 euros menos-. Tiene 4,25 m de longitud y, con esta mecánica, está disponible con dos acabados: Advance y Sport. Por 1.880 € más se ofrece con cambio automático DSG de siete relaciones en vez de con uno manual de seis. Está a la venta desde 2013, si bien recibió un restyling en marzo de 2017.
Qué tiene de bueno. Es el mejor por acabados -sobre todo por ajuste y remates, más que por materiales- y también el que tiene una imagen más premium, algo que le hace ser de los que menos se deprecian. Su chasis es tan bueno como el del Seat León -con el que comparte mecánica y plataforma-, por lo que su comportamiento es excelente y su comodidad, elevada. Ocurre lo mismo con su motor, muy bueno por consumo y prestaciones. Frente al Seat, el Golf es un poco más amplio detrás.
Qué tiene de malo. Es el más caro de todos con diferencia, y no por ello está entre los más equipados de serie.
Veredicto. Es el más interesante por imagen premium, acabados y por cómo va tanto por motor como por comportamiento. Sin embargo, su precio es elevado.